La sexta ola de Covid-19 es la más explosiva y duradera, pero la segunda menos mortal en España

Los datos del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (Ccaes) indican que la sexta ola comenzó el pasado 15 de octubre , cuando la curva de contagios comenzó a ascender, entonces con 40,85 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días.

Con algunos descensos puntuales, la sexta ola llegó a su máximo el pasado 21 de enero , con 3.418,46 casos, lo que supone un récord en España a lo largo de toda la pandemia.

Por tanto, esta oleada se ha prolongado a lo largo de tres meses y siete días hasta alcanzar su pico. En ese periodo se notificaron 3.993.320 personas contagiadas y 4.824 fallecidas. Así pues, la tasa de letalidad de la sexta ola hasta su punto culminante fue de una persona fallecida por cada 827,80 casos de contagio diagnosticados.

En cuanto a la duración, ninguna se ha extendido tanto en el tiempo como esta sexta ola, ya que la primera se prolongó desde el 26 de febrero de 2020 -primer día con datos oficiales del Ministerio de Sanidad- hasta el 5 de abril de ese año (es decir, un mes y ocho días); la segunda duró un mes y cuatro días (del 6 de octubre al 9 de noviembre de 2020), la tercera abarcó un mes y 17 días (del 11 de diciembre de 2020 al 27 de enero de 2021), la cuarta se alargó un mes y 10 días (del 17 de marzo al 26 de abril de 2021) y la quinta sumó un mes y cinco días (del 23 de junio al 27 de julio de 2021).

Con ello, la variante ómicron influyó en que la sexta ola prácticamente triplicara su duración desde su comienzo hasta que llegó al punto culminante de la curva en comparación con la media de las olas anteriores, que se situó en un mes y pocos días más.

Por otro lado, la sexta ola marcó un nuevo récord con casi cuatro millones de contagios diagnosticados (concretamente, 3.993.320), por delante de la tercera (950.046), la quinta (599.762), la segunda (567.806), la cuarta (288.445) y la primera (130.749).

Esto tiene su reflejo también en la incidencia acumulada, que se disparó hasta 3.418,46 casos por cada 100.000 habitantes, muy por delante de los máximos de la tercera ola (899,93), la quinta (701,92), la segunda (529,43), la cuarta (235,59) y la primera (217,30).

Sin embargo, los datos muestran el reflejo de la vacunación en los efectos del Covid-19, puesto que la tasa de letalidad es menor tanto en la quinta ola (una persona fallecida por cada 992,98 casos notificados) y en la sexta (una por cada 827,80). Por el contrario, la primera resultó ser la más letal (una víctima mortal por cada 10,53 casos).