Richard Gere: «Es inmoral que un banco eche a la gente de su casa»

El tema le servía de promoción de su última película, titulada en España «Invisibles» y en la que da vida, precisamente, a una persona sin hogar. Pero Gere fue más allá del interés comercial, manifestando su faceta de activista social y apoyando a la Fundacíon Rais, que se dedica precisamente a la lucha contra esta situación de las personas sin hogar. Dijo haberse sentido sorprendido cuando, al rodar su película en Nueva York, caracterizado como un mendigo, comprobó cómo durante 42 minutos «ni una sola persona estableció contacto visual conmigo»: nadie le miraba porque nadie quería verle.

Gere abogó por la recuperación de las personas sin hogar, no sólo proporcionándoles un albergue que sea «como un almacén con camas», sino reintegrándoles a la vida porque «nada impide que acabe el círculo vicioso» que les condujo a esa situación. Al contacto con estas personas, « he aprendido cómo de rápido puedes deteriorarte , cuán frágil es nuestra mente», y recordaba el caso de un hombre que se le acercó en un albergue y le dijo: «¿No me recuerdas, Richard? Rodamos juntos hace cinco años». En ese momento, estaba allí, «viviendo en el albergue, y no sabía explicar cómo había ocurrido».

Los datos que aportó el presidente de la Fundación Rais, Fernando Vidal, hablan del coste de asistencia social a una persona sin techo, que es de 16.000 euros anuales, cuando proporcionarles un piso y un cuidado social supondría 12.500 euros. La razón económica, recordó Gere, también apoya la atención de estas personas. En cuanto a los desahucios, fue muy crítico con los bancos, y quiso recordar que «es una estupidez la avidez por el dinero; no hay espacio para meter el dinero en el cementerio».

Richard Gere no evitó otros temas polémicos, como la amenaza del terrorismo yihadista. En este sentido no quiso justificar lo que ocurre: «Son asesinos que matan y hacen que nos sintamos inseguros», dijo, pero pidió «pensar en las causas», y reflexionó: «Aquí está ocurriendo algo que debemos explorar; si no, no lo solucionaremos». En cualquier caso, en su opinión «la venganza nunca ayuda a nadie».

Respecto a la mujer y su papel en la sociedad, se mostró convencido de que «el cambio va a venir de las mujeres» , una frase que fue muy aplaudida por quienes le escuchaban. Señaló que la violencia de género es «el resultado de la frustración: nos portamos mal cuando no sabemos cómo encajar en el mundo».

Al finalizar su intervención en el Foro, Gere charló unos minutos con el Padre Ángel, de Mensajeros por la Paz, y con la ayuda de su novia española, Alejandra Silva, que hizo de intérprete entre ellos, conoció la labor de este religioso con personas sin hogar a las que acoge en la iglesia de San Antón. Tanto se interesó que le prometió visitar el templo, cosa que hizo apenas unas horas después.