Un profesional «brillante» e independiente

Rafael Bengoa (Caracas, Venezuela, 1951) es un experto de prestigio internacional en materia de gestión sanitaria y uno de los principales defensores de la tesis de que los sistemas públicos de salud en el mundo occidental deben reorientar su atención a los pacientes que más recursos acaparan, los crónicos, para garantizar su sostenibilidad.

Precisamente, como consejero de Sanidad del Gobierno del PSE ha defendido su agenda reformista, frente al copago y otros recortes, como alternativa más eficaz para ahorrar y asegurar el futuro del sistema frente a una población cada vez más envejecida.

Entre los hitos de su mandato como consejero de Sanidad el Gobierno Vasco del PSE, además de su estrategia de crónicos, destaca el pulso que mantuvo con la industria farmacéutica para extender el uso de genéricos en el sistema vasco de salud o el uso intensivo de las nuevas tecnologías para mejorar la atención a distancia y el seguimiento a los pacientes.

En los grandes titulares se ha resaltado su oposición frontal al denominado «copago farmacéutico» decretado por el Gobierno del PP. Pese a todo, desde este partido destacan su enorme valía profesional. «Uno de los mejor consejeros de sanidad que hay en España», dijo de él el «popular» Santiago Cervera .

El actual consejero vasco de Sanidad tiene un currículum académico y profesional «brillante», una de las razones por las que ahora Barack Obama, y antes el Gobierno del PSE, se fijaron en Bengoa. Hace 18 años el médico vasco ya colaboró con la administración Clinton para llevae a cabo la reforma sanitaria de los demócrata, finalmente frustrada.

Es Doctor en Medicina de la Universidad del País Vasco (UPV), Máster en Gestión de Sistemas de Salud y Máster en Salud Comunitaria de la Universidad de Londres en Inglaterra, Senior Fellow de la Business School de la Universidad de Manchester en Inglaterra y Diploma Gestión Hospitalaria en Deusto, según consta en su página web .

Bengoa trabajó durante catorce años en la Organización Mundial de la Salud, donde ocupó hasta 2006 la dirección de Sistemas de Salud. También ha dirigido el Observatorio Kroniker, un organismo independiente de análisis de los sistemas sanitarios a nivel mundial. Bengoa es además coautor del conocido «Informe Abril», que en 1990 sentó las bases para la reforma de la Sanidad en España, y entre 1991 y 1995 participó también en el despegue del actual sistema vasco de Salud «Osakidetza».

Todos son elogios de sus compañeros en el Ejecutivo Vasco , que resaltan que se trata de un «tipo brillante» pero a la vez «un hombre muy sencillo, que nunca se da importancia» pese a su renombre internacional. «Rafa habla bajito pero siempre muy claro, al nivel de sus interlocutores», afirma un colaborador.

El amante declarado de las motos, Bengoa afirma que el sistema de salud funciona a menudo como un taller de reparación que se centra «en las averías agudas», sin poner el foco en la prevención y el seguimiento continuo del paciente. Suele recordar también que el cuerpo humano puede fallar de 13.500 formas distintas y que para cada una de ellas hay algún tipo de tratamiento, pero que la Sanidad no puede enfrentarse a retos como el envejecimiento de la población con herramientas y modos del siglo pasado.

«El sistema de salud que aún tenemos fue creado con una lógica de rescate de lo agudo». Y su diseño fue casi como el de un garaje de reparación al problema agudo del paciente: «Te arreglo y te vas para casa», dijo durante un foro informativo el pasado mes de julio.

Otro de sus colaboradores en estos últimos cuatro años admite que «tenerle cerca ha sido una gozada. Es una persona honesta y justa. Un lince», asegura.

Las reacciones por la noticia adelantada por ABC se están produciendo en las redes sociales. En su cuenta de Twitter, el portavoz del PSE en el Parlamento vasco, José Antonio Pastor, ha trasladado su «enhorabuena» al consejero Bengoa, «un ejemplo de la calidad del Gobierno Vasco de Patxi López».

Nacido en el seno de una familia nacionalista –su padre, también médico, fue colaborador del lendakari en el exilio José Antonio Agirre-, su fichaje como «independiente» por el PSE fue vivido en el PNV como una «traición».