El personal de las residencias griegas que no se vacune perderá su trabajo a partir de este lunes

Esta medida fue anunciada hace varias semanas, para reducir los riesgos de contagio y ante la falta de vacunaciones tanto de personal sanitario como de las restantes profesiones en estas residencias. Εl primero en anunciarlo fue el primer ministro Kiriakos Mitsotakis, que lo anunció el mes de julio, comenzando por las residencias de la tercera edad, por ser los que corren más peligro, anunciando que también serán obligados a vacunarse el personal sanitario de todo el país , ya que «es impensable por ejemplo que una enferma no vacunada atienda a un paciente con cáncer inmunodeprimido», insistiendo en que está seguro que «con esta decisión está de acuerdo la mayor parte de la sociedad».

La ley aprobada decreta que quienes no se vacunen mantendrán su puesto de trabajo un tiempo pero se verán alejados de su puesto de trabajo de forma inmediata y no cobrarán sueldo. Asimismo, los centros que empleen personas no vacunadas serán multados con entre 10.000 y 50.000 euros por la primera infracción y desde 20.000 a 200.000 euros por la segunda, algo que obligará al cumplimiento de esta medida estatal. El 1 de septiembre ocurrirá lo mismo en todos los hospitales y centros de salud del país, tanto públicos como privados.

En el sector público los no vacunados se verán alejados de sus puestos y sin paga hasta que se cumplan los 14 días tras completarse su vacunación. En el sector privado, el trabajador no vacunado tendrá el mismo trato y la dirección del centro será multada por emplear personal no vacunado.

Es conocido que mientras el 93% de los médicos griegos ya han sido vacunados , el porcentaje entre personal sanitario y administrativo restante en la mayoría de los hospitales y centros de salud superaba el 70%. Pero en las residencias y demás estructuras asistenciales no se había alcanzado a principios de julio el 70% y menos en los centros relacionados con la Iglesia Ortodoxa. Algo que tendrá que cambiar a partir de hoy.

La primera noticia se ha conocido la mañana de este lunes gracias a la televisión estatal: la residencia de ancianos de la ciudad de Vólos (Grecia Central) ha alejado de su trabajo a diez personas. Habían sido repetidamente avisadas por la dirección, que procedió a convocar estas plazas para encontrar a sus sustitutos, en este caso enfermeros, empleados para servicios generales y cocineros, todos ellos para trabajar a tiempo completo en Vólos.

Los empleados sanitarios de esta ciudad se han declarado en huelga contra la obligación de vacunación efectuando un paro laboral y con protestas esta mañana ante el hospital general de la ciudad.

En la isla de Rodos han sido seis las personas que no han podido acudir a trabajar esta mañana: lo ha confirmado también por televisión la presidenta de las residencias estatales de la isla María Korakaki, insistiendo en que la prioridad «es proteger los grupos vulnerables».