El Parlamento balear insta al Gobierno central a despenalizar la eutanasia y el suicidio asistido

El título de esta iniciativa parlamentaria, que constaba de tres puntos, era «Regulación de los derechos y garantías de las personas en el proceso de morir y al derecho de la eutanasia». En el punto segundo, se señalaba que «el Parlamento de las Islas Baleares insta al Gobierno del Estado y el Congreso a estudiar y a tramitar una iniciativa legislativa que modifique el artículo 143.4 de la Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal, para facilitar una muerte digna, pero también con la despenalización de la eutanasia y el suicidio asistido en aquellos casos en que la persona plantee la posibilidad de poner fin a la vida por decisión propia».

Ese segundo punto contó con los votos a favor del PSOE, Unidas Podemos, MÉS per Mallorca, MÉS per Menorca, el partido nacionalista de centro Proposta per les Illes (PI) y Cs, mientras que el PP y Vox votaron en contra. El mismo sentido del voto se dio en el tercer punto de la propuesta, que indicaba que «el Parlamento de las Islas Baleares insta al Gobierno del Estado y el Congreso a estudiar y tramitar, de manera definitiva, una iniciativa legislativa para regular sistemáticamente y de manera ordenada los supuestos donde la eutanasia no sea tipificada penalmente».

El primer punto de la citada proposición no de ley sí contó con el voto favorable del PP, si bien Vox votó igualmente en contra. «El Parlamento de las Islas Baleares insta al Gobierno del Estado y el Congreso a elaborar una ley de derechos y garantías de las personas en proceso de morir a nivel del conjunto del Estado», señalaba dicho punto.

El PP había presentado una enmienda de sustitución de los tres puntos mencionados, para reemplazarlos por un único punto, con el siguiente texto: «El Parlamento de las Islas Baleares insta a todos los grupos políticos con representación en el Congreso de los Diputados a elaborar una ley que haga efectiva la aplicación de los cuidados paliativos a toda la sociedad, a fin de que, con los máximos recursos posibles, se garantice la calidad de vida y la dignidad de la persona».

Esta enmienda del PP no fue aceptada por los tres grupos que habían presentado la propuesta originaria, por lo que no salió adelante.