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El Papa y la Curia vaticana se van seis días de ejercicios espirituales en silencio

Francisco recuerda a los nueve seminaristas mártires de Asturias beatificados el sábado

Francisco, durante el Ángelus del 10 de marzo AFP
Juan Vicente Boo

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A término del rezo del Ángelus del domingo, el Papa Francisco ha pedido a decenas de miles de fieles reunidos en la plaza de San Pedro que recen «por mí y por los colaboradores de la Curia vaticana que esta tarde iniciamos la semana de Ejercicios Espirituales ».

Como todos los años, el Papa y sus principales colaboradores toman juntos un autobús para dirigirse a una casa de retiros en Ariccia, una localidad situada a una hora del Vaticano , cerca de Castel Gandolfo.

Durante seis días de ejercicios en completo silencio, los participantes visten una sencilla sotana o clergyman sin ningún distintivo de sus cargos, concelebran la misa a las siete y media de la mañana y escuchan cada día dos meditaciones.

El predicador seleccionado por el Papa este año es el benedictino Bernardo Gianni , abad de San Miniato, en Florencia, quien perdió la fe de joven pero la recuperó, de repente, a los 24 años.

El próximo miércoles 13 de marzo Francisco celebrará en silencio el sexto aniversario de su elección como Papa. Será una jornada agridulce, pues coincide con la imposición de sentencia de cárcel por abuso de menores al cardenal australiano George Pell , quien ha presentado ya recurso de apelación a su condena por el Tribunal de Melbourne.

En su comentario al Evangelio del domingo, que relata las tres tentaciones de Jesús en el desierto, precisamente cuando realizaba un retiro en solitario, el Papa ha dicho que el demonio insidia siempre con «la avidez de posesiones -¡poseer, poseer, poseer!-, la gloria humana y la instrumentalización de Dios».

Por contraste, Francisco ha presentado como ejemplo de amor a Dios a los nueve seminaristas asturianos de 18 a 25 años asesinados entre 1934 y 1937, y beatificados el sábado en Asturias . Entre los asistentes a la ceremonia se contaban 130 familiares de los mártires.

El Papa ha pedido que «su testimonio heroico ayude a los seminaristas, sacerdotes y obispos a mantenerse puros y generosos para servir fielmente al Señor y al pueblo de Dios».

Antes de despedirse, ha dirigido un saludo especial a los estudiantes de Castro Urdiales que han peregrinado a Roma.

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