El Papa pide oraciones por las víctimas de las bombas contra tres iglesias cristianas en Indonesia

En su encuentro con decenas de miles de peregrinos reunidos en la plaza para el rezo del «Regina Coeli», el Santo Padre les ha invitado a rezar juntos «por las víctimas y sus familiares», pidiendo «al Dios de la paz que haga cesar toda violencia y se abran paso en los corazones sentimientos de reconciliación y fraternidad».

La reacción de la policía de Indonesia - el país con el mayor número de musulmanes de todo el mundo, con unos 200 millones - fue inmediata, ordenando la suspensión del culto y el desalojo en todas las iglesias de Surabaya hasta que se verifique la ausencia de otros explosivos.

Las dos principales organizaciones islámicas de Indonesia fueran rápidas y firmes en sus condenas. Nahdlatul Ulama ha invitado a hacer frente a los terroristas, «en nombre de la humanidad» y de modo activo: «Si veis la más mínima acción que pueda llevar al radicalismo, por favor, denunciadla inmediatamente. Todos los actos violentos son contrarios a los valores islámicos y a todos los valores religiosos».

A su vez, el líder de Muhammadiyah, Saad Ibrahim , ha manifestado que la organización «es fuertemente contraria a los ataques suicidas que han tenido lugar en Surabaya esta mañana».

En sus palabras a los fieles, el Papa Francisco ha recordado que, justo antes de la Ascensión, Jesús dio el mandato de la evangelizar por todo el mundo «a un pequeño grupo de hombres sencillos y sin gran capacidad intelectual». Parecía un objetivo completamente desproporcionado, pero lo emprendieron a un ritmo inaudito «con la fuerza del Espíritu Santo».

El Santo Padre ha hecho notar que hoy se celebra la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales sobre el tema «Fake news y periodismo de paz», por lo que ha invitado a los periodistas «a esforzarse por buscar la verdad de las noticias, contribuyendo a una sociedad justa y pacífica».

Pero sus palabras más afectuosas han sido las de felicitación a las madres -cuya fiesta se celebra en Italia el segundo domingo de mayo-, pidiendo un aplauso para todas ellas, incluidas «las que están ya en el cielo y continúan cuidándonos con su oración».