«El origen del machismo y las violaciones en grupo reside en el abuso del porno»

¿Cómo debería ser la educación sexual impartida en la escuela?

Debería empezar desde infantil y para eso deberíamos de hacerla los profesionales de la educación y conforme el niño va creciendo, debería adaptarse . Es muy importante que empiecen desde el principio y que los padres también contribuyan. De hecho, si un adolescente no tiene resuelto sus problemas emocionales, va a fracasar también en lo curricular.

¿Deben impartir la educación sexual profesionales de la educación?

Lo que tenemos que potenciar es que haya suficientes orientadores en los centros para que esto sea una tarea que hagamos los orientadores y los tutores. No se puede dejar en manos de personas ajenas a la escuela esta formación . En España, salvo en muy pocas comunidades, hay un orientador en secundaria por instituto, independientemente del número de alumnos que haya. Con esa precariedad de recursos lo que hacemos los orientadores en tutoría es contratar entidades o bien gratuitamente o subvencionadas que hacen la formación.

¿En otros países de Europa también ocurre lo mismo?

No. Si hubiera un orientador con una ratio como recomienda la UNESCO cada 250 alumnos, además de prevenir los problemas de aprendizaje y orientar, podríamos dedicarnos más a estas actividades de tutoría para solucionar problemas como el acoso escolar, o tratar el tema de la educación sexual.

¿Cómo puede ayudar la educación sexual?

El origen del machismo y las violaciones en grupo reside en el abuso de páginas web pornográficas y en la ausencia de una educación afectivo-sexual y emocional en condiciones. Esta educación afectivo-sexual y emocional tiene muchas afecciones porque prevendría el machismo, el mal uso de las redes sociales. No puede prolongarse esta cosificación, el abuso de los selfis, el culto a la imagen. Todo esto debe tener un abordaje mucho más intenso.

¿Por qué es importante controlar el uso de las redes sociales?

Las niñas se están exponiendo mucho en las redes sociales porque para ser más populares, cuelgan imágenes y fotografías cada vez más explícitas y son el foco de personas que se aprovechan de esto. Luego llega el chantaje emocional. Las «pruebas de amor» por las que adolescentes se someten a ser grabadas mientras practican sexo son demasiado frecuentes. Lo peor es que esto termina difundiéndose. Este es un fenómeno que llega cada vez a más adolescentes y del que los adultos no nos hemos enterado todavía.