Ofensiva de Pablo Casado en el Congreso para frenar el ataque del PSOE a la concertada

Se reunirá mañana con el sector e impulsará una Proposición no de Ley para evitar que se reforme la Lomce y se elime el criterio de demanda social para abrir nuevas unidades

Pablo Casado, a la derecha, con la portavoz del PP en el Congreso, Dolors Montserrat ABC

12/09/2018 a las 02:29h.

El Partido Popular va a poner en marcha una ofensiva para intentar frenar el ataque del Gobierno socialista contra la educación concertada. Las medidas anunciadas por la ministra de Educación, Isabel Celaá, en relación a la reforma de la Lomce para eliminar el criterio de demanda social para abrir nuevas unidades, ha hecho saltar las alarmas, tanto entre los populares como en el sector educativo.

Ante esta situación, el presidente del PP, Pablo Casado , mantendrá un encuentro mañana con el sector educativo en el Congreso de los Diputados. El objetivo de esta reunión, según ha podido saber ABC, es presentarle el texto de la Proposición no de Ley que registrará el Grupo Parlamentario Popular para se debata en el Pleno de la Cámara.

Con esta moción, los populares intentarán que el Ejecutivo de Pedro Sánchez no pueda suprimir el artículo 109.2 de la Lomce, que se refiere al criterio de demanda social para autorizar más plazas en la educación concerta. O lo que es lo mismo, a más interés de los padres más educación concertada.

«Imposición»

Las fuentes populares consultadas aseguran que «el Gobierno no puede darle la espalda a la voz de los padres a la hora de elegir la educación que quieren para sus hijos. Hay que atender las demandas de las familias».

Esta formación política afirma que «darán la batalla en defensa de la libertad de enseñanza , de la pluralidad de la escuela pública y de los centros concertados».

La presión de los populares se une a las críicas de una parte del sector educativo que denunció que los cambios en la Lomce se realicen por «imposición», sin que se debatan en el seno del Pacto por la Educación. Un Pacto que se frustró tras abandonar el PSOE las reuniones que se habían celebrado durante un año, condicionando su regreso a la inversión de un 5% del PIB en Educación.

El entonces Gobierno socialista aceptó la demanda de los socialistas, pero éstos se negaron a volver a negociar el pacto. Cuando Pedro Sánchez llegó a la Moncloa, una de las primeras medidas anunciadas fue el freno a la educación concertada, aunque la ministra Celaá reguló al darse cuenta de la dimensión de su anuncio y afirmó que no había intención de perseguir a la concertada.