México vuelve a sentir la amenaza de la naturaleza: el ciclón Max gana fuerza

El reporte de la SMN son más malas noticias para México y para Guerrero, uno de los estados más pobres de la República. El país todavía se está recuperando después de que después de que un terremoto de magnitud 8,2 -el más intenso jamás registrado en México- y el huracán Katia arrasaran la semana pasada el sur y el este del país, respectivamente.

Por ahora, el sismo ha provocado un total de 98 fallecido s desde que sacudió el pasado jueves los sureños estados de Oaxaca, Chiapas y Tabasco. Desde entonces, las fatales cifras no han parado de ir en ascenso. Primero fueron unas veinte, luego más de cuarenta y en las últimas horas ya se acerca al centenar de muertos.

Además, los cientos de personas han perdido sus casas y se encuentran viviendo a la intemperie, a la vez que denuncian la falta de ayuda humanitaria y de apoyo estatal, contaban a ABC vecinos de Juchitán, el municipio donde se cuentan más de la mitad de las víctimas mortales.

A su vez, el huracán Katia ha arrasado el occidental estado de Veracruz, dejando al menos 25.387 viviendas destruidas y más de 101.549 personas afectadas. También hay un total de 8 carreteras y 19 puentes dañados, de acuerdo con el Gobierno de Veracruz, que ha solicitado que el Ejecutivo federal realice una declaratoria de desastr e para casi todos sus municipios, ya que sólo dos ciudades de las 212 que tiene este estado no han sido afectadas por el temporal.

Max, la nueva tormenta que se aproxima a la costa oriental del país, es el decimotercer ciclón tropical que se forman en el Pacífico mexicano en lo que va de temporada de huracanes. Toda la zona de la costa que va desde Zihuatanejo a Punta Maldonado está en alerta, puesto que se espera que poco antes de que toque tierra provocará lluvias e inundaciones en Guerrero y Oaxaca.

Con el fin de reducir al mínimo el número de víctimas , las autoridades estatales han suspendido las clases en dicha área y, asimismo, Protección Civil activó su Alerta Roja y ha calificado la situación de «máximo peligro» hasta que pase el fenómeno atmosférico.