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Un médico que estaba siendo asaltado en su casa simula un infarto para espantar a los ladrones

Los malhechores, al parecer de origen rumano, agredieron a la familia mientras buscaban un botín de 7 millones de euros, pero se habían equivocado de vivienda en Marbella

Vista de los exteriores donde tuvo lugar el asalto Diario Sur | Charo Márquez

ABC

Cuando la integridad de un ser querido está en juego, el instinto humano hace que se disparen todas las alarmas y la cabeza piense a una velocidad superior a la normal. Por eso, cuando a un médico de 73 años le asaltaron en su vivienda de Marbella cuatro violentos ladrones, su cerebro le impulsó a simular que le estaba dando un infarto y así logró que los malhechores huyeran de su casa, no sin antes robarles todo lo que pudieron.

El suceso tuvo lugar la semana pasada en la zona de Valdeolletas, donde hay diversos chalets adosados y urbanizaciones en Marbella. Según informa Diario Sur , el hijo, de 29 años, se encontraba en la parte superior de la vivienda cuando vio cómo se colaban cuatro hombres vestidos de negro y ocultos bajo pasamontañas. Habían logrado entrar desde la casa contigua a través de una escalera, accediendo por una ventana a su habitación. Lo retuvieron y golpearon.

Tras retener al joven, dos de los cacos descendieron a la parte baja de la vivienda, armados con barras de hierro, donde estaban el médico y padre de familia y su mujer, de 57 años, viendo la televisión. Tras irrumpir en la estancia, golpearon sin piedad al matrimonio , preguntando con insistencia dónde ocultaban una supuesta caja fuerte que contenía siete millones de euros.

La familia les trató de convencer de que no tenía ni caja fuerte ni tanto dinero guardado en la casa, pero los asaltantes siguieron golpeándoles. Por momentos reconocieron que podían haberse equivocado de lugar.

Mientras, en la planta superior, ante el peligro en el que se encontraban, el hijo les indicaba que podían llevarse las joyas de su madre y el dinero que allí tenía – unos 10.000 euros –. En la parte inferior, el padre de la familia, médico de profesión, pensó rápidamente que fingiendo que le daba un ataque al corazón podía ahuyentar a los asaltantes. Así lo hizo. Los dos cacos que había presentes comenzaron a ponerse muy nerviosos y subieron rápidamente para dar el aviso y, ante el temor de que el hombre pudiera fallecer, abandaron a toda la prisa el chalet.

Debido a la situación de extrema tensión, la mujer sufrió una angina de pecho y tuvo que ser ingresada. La Policía Nacional ha abierto una investigación para esclarecer los hechos y detener a los ladrones, aunque todavía no ha habido ningún arresto.

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