La OMS ya investiga el coronavirus en Wuhan… en cuarentena

Del más de un mes que pasarán en China, las dos primeras semanas son para la cuarentena obligatoria encerrados en una habitación de hotel. Tal y como han anunciado, aprovecharán este tiempo para tener entrevistas con sus homólogos chinos por videoconferencia. Cuando terminen esta cuarentena, pasarán otras dos semanas en Wuhan visitando centros de investigación, hospitales y el mercado de Huanan, donde se vendían animales y se sospecha que se originó este nuevo coronavirus que ha desatado la peor pandemia en un siglo, denominado Sars-Cov-2.

De momento, lo único que se sabe es que parece venir de los murciélagos , pero esos animales no se vendían en la lonja de Huanan y se desconoce en qué otra especie intermedia mutó el coronavirus hasta pasar al ser humano. Aunque los expertos aseguran que tendrán acceso a toda la información, el régimen chino está intentando escabullirse como origen del coronavirus y apunta a que entró en el mercado de Huanan a través de alimentos congelados importados del extranjero, algo que la propia OMS considera poco probable. Para ello, Pekín se basa en los estudios no concluyentes que han hallado anticuerpos del coronavirus en Italia y Estados Unidos antes del estallido en Wuhan. Pero el periódico «South China Morning Post» ya reveló en su día que los primeros casos de coronavirus en China se detectaron el 17 de noviembre, antes de lo oficialmente reconocido.

La misión llega un año después del estallido en Wuhan y plagada de dudas sobre la transparencia del autoritario régimen de Pekín, que intentó ocultar la epidemia silenciando a los médicos que alertaban sobre ella, como el doctor Li Wenliang. Bajo un clima internacional muy cargado porque el coronavirus se ha convertido en una cuestión política, el trabajo de los expertos no será nada fácil y estará en todo momento bajo la lupa de la opinión pública.

Además de los 13 virólogos, epidemiólogos, médicos y veterinarios de la misión, que proceden de Japón, Catar, Alemania, Vietnam, Rusia, Australia, Dinamarca, Holanda, el Reino Unido y Estados Unidos, el equipo incluye a técnicos de la OMS y de la Organización Mundial para la Salud Animal (OIE, en sus siglas en inglés). A distancia, les ayudarán dos científicos de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO, en inglés).

«La idea es avanzar en una serie de estudios que hemos diseñado hace unos meses para entender mejor lo que pasó en diciembre. Esos estudios nos ayudarán a retroceder en el tiempo con el fin de identificar zonas geográficas donde el virus pudo haber saltado a la población humana», explica en un vídeo grabado por la OMS el jefe de la misión, el experto en seguridad alimentaria Peter Ben Embarek, quien ya estuvo en China en julio. Rebajando las expectativas, asegura que «puede ser un viaje muy largo antes de obtener un pleno entendimiento de lo que ocurrió. No creo que obtengamos respuestas claras después de esta primera misión. Pero estaremos en el camino, y con suerte, en los próximos meses se completará con expediciones y estudios adicionales que nos lleven lentamente a una comprensión de los orígenes del virus».