Los inspectores denuncian clases en pasillos y huecos de escaleras para cumplir el protocolo Covid

Esto ha generado el aprovechamiento de gimnasios, laboratorios, o la cesión de espacios por parte de los ayuntamientos. Pero, al mismo tiempo, ha obligado a la impartición de clases en condiciones muy sospechsas de ser las adecuadas. La Unión Sindical de Inspectores de Educación ha denunciado el uso de espacios como pasillos o huecos de escaleras «en colegios e institutos de toda España» para dar clase y mantener los 1,5 metros de distancia, han explicado a ABC desde el sindicato. Este no ha especificado cuáles son los centros afectados porque los inspectores actúan « con miedo » a sufrir represalias de las consejerías.

Esta situación se puso de manifiesto en el I Encuentro Virtual de la Inspección de Educación a cuyas conclusiones ha accedido ABC y en la que se advierte de « la constatación de carencias en la infraestructura de los centros a la hora de afrontar su organización para cumplir las normas sanitarias que han requerido el desarrollo de actuaciones concretas por parte de la inspección educativa de cara a minimizar las posibles dificultades detectadas».

Al margen de esta situación los inspectores concluyen que «La “escuela Covid” está funcionando porque los profesores están al margen del politiqueo».

Otro tema que han denunciado durante el encuentro es la existencia d e 18 inspecciones educativas distintas (las 17 comunidades además de Ceuta y Melilla, controlada directamente por el Ministerio de Educación).

Piden que haya una homologación de funciones, atribuciones y procedimientos en la organización y funcionamiento de la inspección en toda las comunidades del país. Los inspectores vienen exigiendo desde hace tres años un real decreto que dé tratamiento común a la acción inspectora en todo el territorio nacional . Los inspectores también pidieron en el encuentro al Ministerio de Educación que comiencen «ya» y no en un año las negociaciones de la carrera profesional docente, contemplada en la disposición adicional séptima de la recién aprobada «ley Celaá» y que involucra a inspectores pero también maestros, profesores, catedráticos, etc.

La nueva norma educativa dice que «el Gobierno presentará, en el plazo de un año a partir de la entrada en vigor de esta Ley, una propuesta normativa que regule la formación inicial y permanente, el acceso y el desarrollo profesional docente». «La regulación de la carrera profesional se está esperando desde el 2007... Corren para los que les conviene pero para lo que no, son bastante lentos », indican desde el sindicato.

USIE también puso el grito en el cielo porque la Lomloe elimina las oposiciones para acceder al cuerpo de inspectores y señala que la fase de oposición consistirá en « la valoración de la capacidad de liderazgo pedagógico y la evaluación de las competencias propias de la función inspectora de los aspirantes, así como los conocimientos pedagógicos, de administración y legislación educativa para el desempeño de la misma». Desde USIE advierten de que «si los órganos de control se politizan carecen de sentido y los ciudadanos caen en indefensión sistemática».