En el pico de la pandemia

Faltaron médicos en seis de cada diez urgencias hospitalarias y test la mitad de los días en la primera ola

ABC accede a la primera radiografía completa del impacto del Covid-19 en estos servicios

Directo Coronavirus: Sigue la última hora del Coronavirus en España

Algunas urgencias de los hospitales colapsaron durante la pirmera ola de Covid en el mes de marzo ABC / Vídeo: Colapso absoluto en marzo en las urgencias del Hospital Infanta Leonor de Madrid por el coronavirus

La primera ola de Covid-19, que tuvo su pico a finales de marzo y comienzos de abril, destapó los déficits estructurales del sistema sanitario público. Los servicios de urgencias hospitalarias fueron la puerta de entrada de estos pacientes al circuito asistencial , uno ... de los ámbitos que sufrió con más dureza la embestida del virus. ABC ha tenido acceso a la primera radiografía global de la situación vivida en los servicios de urgencias españoles durante los meses más intensos de la primera crisis sanitaria causada por el coronavirus.

El informe «Encovur», elaborado por la red SIESTA de investigación colaborativa de servicios de urgencias, revela, entre otras cosas, que el 83 por ciento de los Servicios de Urgencias Hospitalarias (SUH) se vieron obligados a aumentar la dotación de enfermeras y un 59 por ciento la de médicos; que durante más de la mitad de los días de los dos meses de pico hubo escasez de test diagnósticos en estas unidades, que se registró un 5 por ciento de bajas de personal en el 20 por ciento del período analizado y que las dos comunidades más afectadas por la falta de recursos fueron Extremadura y Madrid . La red SIESTA toma el pulso al 87 por ciento de las unidades de urgencias de España durante la fase más crítica de la emergencia (entre el 1 de marzo y el 30 de abril)

Falta de espacio

El informe, cerrado en septiembre, indica, asímismo, que la falta de espacio obligó a más del 80 por ciento de los servicios de urgencias a reorganizar las instalaciones, en las que «se modificaron los triajes, las áreas de observación, además de tener que habilitar nuevos espacios para pacientes con sospecha de Covid-19 , y esto fue más frecuente en las urgencias de hospitales medianos o pequeños y en las de zonas geográficas con mayor incidencia de la pandemia».

La definición de circuitos diferenciados y exclusivos para atender a pacientes con sospecha de Covid-19 fue la norma, según el informe. Respecto a la disponibilidad de recursos diagnósticos y material de protección, del estudio se desprende que las pruebas de diagnóst ico de SARS-COV-2 fue el recurso que tuvo mayor desabastecimiento, el 55 por ciento del tiempo hubo carencias; seguido de las mascarillas FP2 y FP3, con un 38 por ciento; las batas impermeables con un 34 por ciento, y las gafas y pantallas faciales, con un 16 por ciento.

Pese a que los principales déficits registrados fueron de espacio y material de protección, también hubo falta de recursos humanos en el 25 por ciento del período analizado.

En el caso de los hospitales comarcales ese déficit se registró en el 40 por ciento del tiempo analizado. Esa escasez de personal sanitario hizo, según destapa el estudio, que el 83 por ciento de las urgencias de hospitales se vieran obligadas a aumentar la dotación de enfermeras y un 59 por ciento de médicos.

Bajas médicas

Las incidencias durante los meses de marzo y abril por bajas médicas del personal de emergencias fue diferente en las distintas comunidades autónomas, destacando las dificultades de la Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha, Islas Baleares y Cataluña , que tuvieron más del 5 por ciento de profesionales de baja durante los peores meses de la pandemia. Por el contrario, Canarias y Andalucía fueron las menos afectadas.

En general, aquellas comunidades con alta seroprevalencia del SARS-CoV-2 estuvieron más tiempo con insuficiencia de recursos en sus urgencias, si bien llama la atención el déficit de test para la detección de SARS-CoV-2 durante más del 50 por ciento del periodo de pandemia en comunidades con seroprevalencia baja.

Por otro lado, las comunidades autónomas con mayor seroprevalencia fueron las que presentaron un mayor número de bajas del personal de urgencias. Portavoces de la red SIESTA, impulsora del estudio, aseguran que éste brinda «por primera vez, una fotografía global y dinámica» de la situación vivida en los servicios de urgencias españoles durante los meses más intensos de la primera ola de la pandemia y «pone de manifiesto en qué y dónde se produjeron las principales escaseces, algunas de las cuales no tuvieron que ver con el grado de afectación local de la pandemia».

Advierten, a la vez, de que sus resultados pueden servir para tomar nota y evitar los déficits registrados en marzo y abril en las nuevas olas pandémicas».

El estudio «Encovur», el primero que se realiza sobre el impacto organizativo en las urgencias en España, concluye que los déficits más importantes registrados en estas unidades durante la primera ola de coronavirus fueron en instrumentos de diagnóstico y material de protección, aunque empezó también a acusarse lo que, según los expertos, será el gran problema de las próximas olas: la escasez de recursos humanos.

Artículo solo para suscriptores
Tu suscripción al mejor periodismo
Anual
Un año por 15€
110€ 15€ Después de 1 año, 110€/año
Mensual
5 meses por 1€/mes
10'99€ 1€ Después de 5 meses, 10,99€/mes

Renovación a precio de tarifa vigente | Cancela cuando quieras

Ver comentarios