Europa cuenta cada vez menos en el Colegio de cardenales que elegirá al próximo Papa
A pesar de todo, aumenta la presencia de españoles en un eventual cónclave
Francisco ha evitado elegir eclesiásticos con personalidad muy marcada y ha optado por los que combinan capacidad de consenso y un perfil pastoral
El Papa crea 21 nuevos cardenales, entre ellos al español Fernando Vérgez
Una de las misiones más delicadas de cada pontífice es nombrar nuevos cardenales. Y no tanto porque serán sus principales consejeros, sino porque uno de ellos será su sucesor y tomará en el futuro las riendas de la Iglesia católica . De hecho, protocolariamente, ... todo cardenal tiene dignidad de príncipe, en cuanto heredero en potencia de una jefatura de Estado.
Como las palabras cuentan, el Papa no «nombra» ni «hace» nuevos cardenales, sino que los «crea» , pues se trata de una decisión suya unilateral y personalísima. A lo largo de sus 9 años de pontificado , el Papa Francisco ha creado 79 nuevos cardenales electores, para cubrir el puesto vacante de quienes han perdido su derecho a entrar en cónclave por fallecimiento o por haber cumplido 80 años.
Con los 16 nuevos cardenales electores que hará el próximo 27 de agosto, entre ellos el español Fernando Vérgez , consolidará su sello en los equilibrios internos del grupo de quienes elegirán al próximo pontífice . A partir de ese día, de los 132 electores, 11 habrán sido nombrados por Juan Pablo II, 38 por Benedicto XVI y 83 por el Papa Francisco.
Menos Europa y más Asia y África
Francisco está intentando que el colegio de cardenales refleje la demografía de la Iglesia católica. De los 16 nuevos cardenales electores, seis proceden de Asia , en concreto de Mongolia, India, Timor Oriental, Singapur y Corea del Sur; cuatro son americanos (dos de Brasil, uno de Paraguay y otro de EE.UU.); dos africanos (de Chad y Nigeria); y cuatro de Europ a (de España, Francia, Italia y Reino Unido).
En comparación con el grupo que eligió al Papa Francisco hace 9 años, el nuevo colegio de cardenales es mucho menos europeo (sobre todo, menos italiano), mucho más asiático, africano y australiano, y curiosamente ligeramente menos americano.
En el cónclave de marzo de 2013 participaron 115 cardenales , y de ellos, 59 eran europeos. Ahora Europa pasará a tener 53 cardenales electores, que serán sólo 50 a finales de año cuando tres de ellos habrán cumplido 80 años. Pierde sobre todo cardenales italianos, que eran 28 en 2013, y pasan a ser 20 .
América, que tuvo 34 electores, tendrá 38 en agosto, pero también tres de ellos perderán el derecho a votar antes de fin de año, por lo que el continente con más presencia de católicos comenzará 2023 con sólo 35 cardenales. Asia pasa de tener sólo 10 en 2013 a tener 21 ; África, de 10 a 17 cardenales electores; y Oceanía, de 1 a 3.
Además, Francisco ha reducido el peso de la curia vaticana entre los electores , que pasarán de los 38 que había en 2013 a 33 el próximo mes de agosto, y a sólo 28 unos meses más tarde.
Los cardenales en datos
Creados por
Juan Pablo II
Reparto por continentes
59 (51,3%)
Europa
53 (40,15%)
11
34 (29,57%)
América
38 (28,8%)
Creados por
Benedicto XVI
11 (9,57%)
África
17 (9,57%)
2013
38
10 (8,7%)
2022
Asia
21 (15,9%)
1 (0,86%)
Creados por
Francisco
Oceanía
3 (2,27%)
83
Total 2013
Total 2022
115
132
Fuente: Elaboración propia / ABC
Los cardenales en datos
Creados por
Juan Pablo II
11
38
Creados por
Francisco
83
Creados por
Benedicto XVI
Reparto por continentes
59 (51,3%)
Europa
53 (40,15%)
34 (29,57%)
América
38 (28,8%)
11 (9,57%)
África
17 (9,57%)
2013
2022
10 (8,7%)
Asia
21 (15,9%)
1 (0,86%)
Oceanía
3 (2,27%)
Total 2013
Total 2022
115
132
Fuente: Elaboración propia / ABC
«El Papa reconfigura el colegio cardenalicio para responder mejor a las necesidades de la Iglesia y de la humanidad en este momento», asegura Austen Ivereigh, autor del último gran libro entrevista al Papa Francisco, «Soñemos Juntos», elaborado durante la pandemia. En su opinión, la intención de Francisco es que el futuro cónclave tenga presentes «las prioridades e inquietudes de los cristianos de las periferias misioneras», donde la Iglesia es minoría.
Otro fino observador de la actualidad del Vaticano, el vaticanista romano Iacopo Scaramuzzi, considera que el Papa ha nombrado cardenales de países que nunca habían tenido un cardenal, como hará en agosto con Paraguay, Singapur, Mongolia o Timor Oriental, guiado por «la certeza de los misioneros jesuitas de que la fe católica puede inculturarse en todas partes ».
Efectivamente, los cardenales del Papa Francisco pondrán sobre la mesa durante el próximo cónclave cuestiones que hasta ahora habían sido aparcadas en la elección de un sucesor de Pedro, pues primaban las problemáticas sociales y eclesiásticas de Occidente.
El primer cardenal de la historia procedente de Timor Oriental, Virgilio Do Carmo Da Silva, de 54 años, llevará la perspectiva de un país donde el 98% de la población es católica, la media de edad es de 20 años y un 40% tienen menos de 15 años. Algo parecido ocurre con el misionero Giorgio Marengo. A sus 48 años se convierte en cardenal de Ulán-Bator en Mongolia , un país con 5 sacerdotes y poco más de 1500 católicos.
Influencia de Francisco en un eventual cónclave
Los cardenales deciden el perfil del futuro Papa en función de la situación de la sociedad y la Iglesia en el momento de la Sede Vacante , por eso es irrelevante hablar de papables. El perfil del futuro Papa sería completamente diferente si Europa estuviera sumida en una guerra , si el predecesor convoca un concilio, o si estalla una nueva crisis en la Iglesia, como ha ocurrido en el pasado.
El Papa Francisco ha evitado seleccionar cardenales con un perfil definido o con fama internacional, y ha dado prioridad a eclesiásticos que combinan la capacidad de consenso con un evidente perfil pastoral , como el paraguayo Adalberto Martínez Flores que preside a los obispos de su país, o el ghanés Richard Kuuia Baawobr, que fue superior de su orden religiosa y alto cargo de la Unión de Superiores Generales.
Con otros nombramientos, se intenta dar un mensaje a la Iglesia de su país. Anthony Poola, arzobispo de Hyderabad, es el primer cardenal «paria», del grupo de los «sin casta» en India, sometidos a durísimas discriminaciones. El 65% de los católicos de India son paria s, y recientemente protestaron, porque el Vaticano nombra pocos obispos como ellos.
Peter Okpaleke, obispo de Ekwulobia (Nigeria), es un cardenal víctima del tribalismo . Benedicto XVI lo nombró obispo de Ahiara en diciembre de 2012, pero no pudo entrar en su nueva diócesis por las protestas de sacerdotes, que no querían a uno que no fuera de su etnia. En 2020, el Papa le encomendó una nueva diócesis.
Aunque naturalmente tienen un perfil que gusta al Papa Francisco, no son a su imagen y semejanza. Se sabe poco sobre sus decisiones de gobierno o sobre su opinión acerca de cuestiones de actualidad.
«Se equivocan quienes creen que Bergoglio está determinando la identidad exacta de su sucesor», asegura Iacopo Scaramuzzi. «Sobre todo porque cada cónclave es autónomo . Francisco fue elegido por cardenales nombrados por Juan Pablo II y Benedicto XVI, pontífices más bien conservadores; Juan XXIII , que lanzó el Concilio Vaticano II, fue elegido por cardenales nombrados por Pío XII, un noble romano muy prudente», recuerda. Lo único que está claro es que «el próximo Papa será la expresión de un colegio cardenalicio muy globalizado», reconoce
Para Austen Ivereigh, la variedad de perfiles de los purpurados «facilitará la elección de un papa «ungido» por un proceso auténtico de discernimiento eclesial. Pero hará más difícil la tarea de los comentaristas y de los que apuestan en los cónclaves ».
Rompe la barrera de los 120 cardenales electores
La ley que gobierna el cónclave, la «Universi Dominici Gregis» establece que sólo puede haber 120 cardenales electores, pero esa norma queda automáticamente derogada cuando un Papa decide superar esa barrera. Juan Pablo II lo hizo en 2001, cuando llegó a haber 136 cardenales electores; y Benedicto en 2012, cuando llegó a 125. El 27 de agosto habrá, por voluntad de Francisco, 132 purpurados menores de 80 años . Sin contar eventuales fallecimientos de cardenales electores, en septiembre de 2023 volverán a ser 120.
Con los datos de hoy, la clasificación de países con más cardenales electores sigue encabezada por Italia, que tendrá 20 en agosto, pero 18 a finales de año y 13 en septiembre de 2023. Entre los electores italianos no está el cardenal Angelo Becciu pues, aunque tiene 74 años, le fue retirado en 2019 el derecho a participar en un eventual cónclave a causa de acusaciones de malversación de fondos de la Secretaría de Estado.
El segundo país es Estados Unidos, con 10 ; y los terceros Brasil y España con 6. Francia e India, tienen 5 cada uno; Canadá, 4; y países como México, Polonia, Portugal y Alemania, tienen 3.
España, potencia cardenalicia
El Papa Francisco ha nombrado españoles en cada uno de los 8 consistorios , también en el próximo del 27 de agosto. Con el salmantino Fernando Vérgez, gobernador civil del Estado Ciudad del Vaticano, a partir de agosto habrá 15 cardenales españoles, de los que 9, al tener menos de 80 años, pueden votar en el cónclave.
Podría decirse que España es una potencia cardenalicia, aunque cuatro de ellos son obispos en diócesis extranjeras . El navarro José Luis Lacunza, de 78 años, es obispo de David, en Panamá; el franciscano navarro Celestino Aós, de 77 años, es arzobispo de Santiago de Chile; y el cardenal almeriense Cristóbal López Romero, de 70 años, es arzobispo de Rabat, en Marruecos.
También hay cardenales españoles en altos cargos de la Curia Vaticana : además de Fernando Vérgez, están el mallorquín Luis Ladaria Ferrer, de 78 años, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe; el sevillano Miguel Ángel Ayuso Guixot , de 69 años, responsable del dicasterio para el Diálogo Interreligioso.
En la lista de «residenciales» están el cardenal de Madrid, Carlos Osoro, de 77 años; Juan José Omella , arzobispo de Barcelona, de 76 años ; y el arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares Llovera, también de 76 años.
Los seis cardenales «eméritos» españoles son Julián Herranz Casado, de 92 años; el diplomático Santos Abril y Castelló, de 86; el arzobispo emérito de Barcelona, Lluís Martínez Sistach, de 85; Antonio María Rouco Varela, también de 85 años y emérito de Madrid; el claretiano Aquilino Bocos Merino, de 84 años y Ricardo Blázquez , arzobispo de Valladolid, que acaba de cumplir 80.
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