Este es el antiparasitario contra el Covid que puede morir de éxito

Era solo un experimento en cultivos celulares, aún sin probar en pacientes reales. Pero en América Latina, donde el medicamento es bien conocido como fármaco veterinario y frente a algunas enfermedades tropicales, se desató la locura . Perú, Chile y Brasil han introducido la ivermectina en sus guías clínicas del tratamiento del Covid, aunque se reconoce la falta de evidencia científica.

El miedo a morir por el virus ha llevado a algunas personas en estos países a inyectarse preparados pensados para el tratamiento de ovejas y vacas, con graves efectos secundarios . Mientras esto ocurre, investigadores del mundo se echan las manos a la cabeza sobre los riesgos de dar masivamente y sin control un medicamento aún no probado para el nurvo virus.

El experimento australiano provocó dos respuestas opuestas y extremas. Pero, como con la hidroxicloroquina, aún no se ha hecho un etudio reglado y bien diseñado para saber si este antiparasitario tan bien conocido podría tener un efecto real contra el Covid.

Esta es la propuesta de Carlos Chaccour , director científico del proyecto científico contra virus emergentes de Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal). Chaccour ha puesto en marcha un ensayo clínico en España, en colaboración con la Clínica de la Universidad de Navarra. El proyecto consiste en probarlo en 24 pacientes que acaban de contraer la enfermedad y tienen una PCR positiva. Su propuesta es dar una única dosis a una concentración alta pero segura de forma precoz . Si se ve una reducción en la carga viral y la infecciosidad de la gente, se ampliaría el ensayo con un número mayor de personas, cuenta a ABC. Si demostrara su eficacia se podría tener una primera barrera contra el coronavirus, un medicamento de fácil acceso con el que impedir que la infección avance desde los primeros síntomas.

Chaccour conoce bien este medicamento antiparasitario que logró acorrarlar la ceguera de los ríos, una enfermedad cruel que dejaba poblaciones enteras de África y America Latina sin visión por la picadura de insectos . Por eso, cuando se desató la pandemia Chaccour decidió probar si también podía funcionar contra el coronavirus.

No se sabe muy bien cómo funciona la ivermectina pero sí que podría también ser eficaz con una amplia gama de virus, incluido el dengue, el virus del Nilo o el Zika. ¿Por qué no contra el coronavirus?, pensó. Pero con la mala fama que estaba adquiriendo el tratamiento recibió más de un « consejo bien intencionado » para que abandonara. Ha decidido seguir adelante, aunque ahora le falta lo más importante: conseguir suficiente número de voluntarios que participen. El investigador del ISGlobal de Barcelona teme que un buen medicamento que ha salvado de la discapacidad a tantas personas sea estigmatizado por una mala utilización.

El ensayo comenzó en mayo en la etapa postconfinamiento, cuando lo difícil era encontrar enfermos. Los primeros brotes en Pamplona con los festejos de julio reanimaron el trabajo científico .