El doctor Jordi Reina: «Necesitamos saber ahora qué porcentaje de población es ya inmune al coronavirus»

El doctor Reina se dio a conocer de forma mayoritaria en los medios de comunicación el pasado mes de febrero, cuando junto con responsables de la Consejería de Salud y de Son Espases informó acerca del segundo caso de coronavirus registrado en España , un ciudadano británico residente en Mallorca, que se acabó recuperando por completo. En esta entrevista, el doctor Reina habla de la situación actual del Covid-19 en el conjunto de España , con varias observaciones centradas en Baleares.

¿Cree que el número de contagios y de fallecidos que se da en España es real?

Los datos que se dan son de contagiados y de fallecidos a los que se les ha hecho la prueba. Probablemente, la cifra real sea mucho más alta . Así nos lo indicaría de manera implícita la cifra global de fallecidos en España recogida por el Instituto Nacional de Estadística, que contabiliza un notable incremento de muertes. Por tanto, ha habido personas que han muerto de coronavirus que no llegaron a ser diagnosticadas. Por todo ello, el número total real de muertos por coronavirus casi podría doblar el número total que se da ahora. En el resto de Europa también ocurriría algo parecido.

¿Los datos que facilita el Ministerio de Sanidad son correctos?

Sí, lo son. Pero insisto, son datos en los que sólo se hace referencia a las personas a las que se les ha hecho la prueba para ver si estaban infectadas.

Cuando se habla del Covid-19, a menudo aparecen siempre tres porcentajes, 80%, 15% y 5%, ¿qué significan?

Por lo que sabemos ya hasta ahora, se viene cumpliendo siempre la regla de que un 80% de posibles infectados por coronavirus apenas tienen síntomas y se recuperan sin casi darse cuenta, mientras que un 15% acaba sufriendo una neumonía y un 5% debe ingresar en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de un hospital. Paralelamente, es posible que en torno a un 10% de la población general llegue a estar infectada, pero la inmensa mayoría no llegará a ser consciente de que efectivamente lo ha estado.

¿Cuál es la situación ahora mismo en Baleares?

En estos momentos en Baleares estamos en unos índices muy bajos de contagiados, enfermos, fallecidos y saturación de UCI, lo cual es una buena noticia. Seguramente, la insularidad, el aislamiento o el clima han influido en ello. Al coronavirus le afectan, por ejemplo, los rayos ultravioleta del sol, una humedad alta y unas temperaturas elevadas, como las que se registran en Baleares ya en esta época.

Curiosamente, Baleares tuvo el segundo caso de coronavirus registrado en España...

Sí, es cierto. En ese momento ya nos pusimos todos en guardia y quizás esa circunstancia contribuyó a que desde el primer momento estuviéramos muy atentos a cómo podría ser el desarrollo posterior del coronavirus, pensando que podría ir a más y afectar a más personas. El esfuerzo de todo el mundo entonces ha dado sus frutos ahora. Así, podemos decir que en Baleares hemos conseguido contener la pandemia. De hecho, no se expande con la intensidad y virulencia que se observa en otras comunidades. Le daré un dato. Sobre el total de algo más de un millón de habitantes que hay en el Archipiélago, el porcentaje de infectados se sitúa ahora en algo más del 0,1% aproximadamente. En las residencias de las Islas, la penetración también es pequeña. Más allá de esos buenos datos generales, también es evidente que hay un coste inaceptable en vidas humanas.

¿Podría haber un repunte de casos en nuestro país?

Lo primero que necesitamos saber ahora es qué porcentaje de población sería ya inmune al coronavirus . Es importante recalcar que cuando una persona se encierra en su casa, no se infecta, pero al mismo tiempo, al no haber estado expuesta al coronavirus, no crea tampoco anticuerpos. Por eso pensamos que el porcentaje de personas inmunizadas es hoy bastante bajo. De ahí la importancia de hacer ahora el máximo de pruebas a la gente que ha estado confinada en su casa, porque nos faltan datos sobre qué porcentaje real de la población está ya inmunizada.

¿Cómo ve la situación a medio plazo?

Es posible que la incidencia del coronavirus baje en verano, que es algo que suele ocurrir con la mayoría de virus, pero habrá que estar atentos a una posible ola epidémica en octubre o noviembre, si no se consigue una vacuna antes. Por lo que respecta a la salida del actual confinamiento, deberá hacerse de manera gradual y asumiendo que será necesario cambiar en parte nuestra forma de vivir, por ejemplo no asistiendo a reuniones multitudinarias. Por lo demás, si pensamos en las consecuencias negativas de la actual crisis a nivel económico y empresarial, pienso que dentro de un tiempo podremos superarlas, también a nivel turístico.

Hay quienes afirman que el coronavirus ha nacido en un laboratorio..

Es evidente que se trata de un bulo. La mejor forma de evitar ese bulo es analizando el virus, siguiendo la secuenciación del virus. Si hubiera sido creado en un laboratorio, tendría unos indicadores genéticos que serían muy fáciles de descubrir. Por tanto, podemos afirmar que el coronavirus no ha salido de ningún laboratorio. Surgió en China, de un reservorio animal silvestre, y hemos tenido luego la mala suerte de que este virus se ha transmitido a los seres humanos. Sólo añadiría que el coronavirus que ha sido detectado posteriormente en Europa ha mutado un poco con respecto al virus originario .

¿En la actualidad deberíamos de llevar siempre mascarillas?

Si hay mascarillas para todo el mundo, debería de ser así, sí. Dicho esto, es importante que la actual carencia no se convierta en una guerra de mascarillas. Una mascarilla es siempre una buena barrera mecánica. Ahora sabemos que la cantidad de virus que se expulsa hablando es prácticamente la misma que la que se expulsa tosiendo. A través de la saliva, de las gotitas que expulsamos al exterior al hablar, se puede producir un contagio. Por tanto, yo sería partidario de usar siempre mascarillas durante un tiempo, por ejemplo siempre que vayamos a comprar. Pero insisto, es necesario que haya mascarillas para todos.

Hablando de protección, nuestros abuelos sabían ya de la bondad del agua, el jabón y la lejía...

Sí, es curioso. Las mejores medidas de protección hoy siguen siendo las mismas que ya funcionaban perfectamente hace varias décadas o incluso con anterioridad. De pequeños, nuestros abuelos y nuestros padres nos insistían en la importancia de lavarse las manos con agua y jabón después de ir al baño o antes de comer. En cuanto a la lejía, la verdad es que no hay mejor desinfectante, pues no hay ningún virus que lo resista. De alguna manera, se trata de volver ahora a antiguas costumbres de higiene y de limpieza que ya sabíamos con anterioridad que eran muy buenas.