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ESPECIAL COLEGIOS

El desafío de avanzar sin que ningún alumno se quede atrás

En 3º de la ESO hay un cambio hormonal en los alumnos y los suspensos suelen aumentar porque hay un conflicto de personalidad

Es importante premiar el esfuerzotanto en casa como en el centro, dicen los expertos ABC

Belén Rodrigo

En todos los colegios hay siempre alumnos que se van quedando rezagados del resto de la clase y a quienes les resulta más difícil alcanzar los objetivos de cada curso. Según los últimos datos del Informe PISA de 2017, el 31% de los alumnos españoles ha repetido al menos una vez antes de los 15 años. «Un mal rendimiento académico implica mucho desgaste a nivel familiar. En muchas ocasiones se opta por tener un profesor particular para que los deberes no tengan repercusión en la vida familiar», explica a ABC la psicóloga Rocío Ramos-Paul. El niño puede vivir este fracaso académico desde distintos ámbitos y colegio y familia deben establecer métodos para que puedan mejorar sus resultados. «Si se transmite la sensación de fracaso va a afectar la autoestima de los alumnos. Es importante premiar el esfuerzo tanto en casa como en el centro», aconseja esta profesional. En algunas ocasiones, cuando los malos resultados no abandonan a nuestros hijos, «cabe preguntarse por la estructura del colegio y ver si es la adecuada para ellos», advierte la directora del centro Ramos-Paul.

En la Educación Primaria anteriormente solo se podía repetir curso al finalizar cada ciclo (en 2º, en 4º y en 6º de Primaria). Sin embargo, con la Lomce, ahora solo se puede repetir una vez a lo largo de la etapa y en cualquiera de los cursos. Ya en Secundaria, durante el primer ciclo de la ESO (1º, 2º y 3º) solo se podrá repetir el mismo curso una vez, y en todo el ciclo un máximo de dos veces. En el caso de los alumnos de 4º pueden llegar a repetir dos veces si nunca lo han hecho en los cursos anteriores de la ESO. «La repetición es una medida de carácter excepcional que se aplica cuando las otras medidas no han hecho efecto y cuando se vea que la permanencia un año más en el mismo curso va a ser buena para el alumno», reconoce José Carlos Gibaja, subdirector de centros de Educación Infantil, Primaria y Especial.

Clases de refuerzo

Actualmente en cada centro se establecen medidas adicionales que tratan de dar apoyo y refuerzo a aquellos niños que están atrasados. En el colegio San Agustín de Madrid, por ejemplo, un equipo de psicólogos, psicopedagogos, profesores y orientadores se ocupan muy cerca de aquellos que tienen más dificultades para aprender. Y en el caso de los más pequeños se trabaja en los casos que presentan dificultades en el lenguaje. «Al empezar Primaria se les hace una evaluación para ver las dificultades de cada niño y se trabaja con quien lo necesite fuera de clase, es un refuerzo», indica a ABC Marisa Puente, orientadora de Secundaria y coordinadora de calidad en el colegio San Agustín.

Para aquellos estudiantes que van arrastrando asignaturas pendientes de un trimestre a otro se les ofrece clases de apoyo, antes del inicio de la jornada escolar. «En este refuerzo voluntario se trabaja con ellos poco a poco sobre aquello de lo que se van a examinar. Se realizan parciales para que puedan asimilar mejor la materia», indica Puente. En este centro concertado realizan además una evaluación psicopedagógica «donde se pueden detectar problemas como el déficit de atención y a veces derivamos los casos a gabinetes externos». En Secundaria existe una ayuda extra para aquellos a quienes se les atragantan las materias de Lengua y Matemáticas. «En lugar de francés tienen más refuerzo». Tal y como señala la orientadora, en 3º de la ESO hay un cambio hormonal y personal en los alumnos «y el índice de suspenso suele ser mayor porque existe un conflicto de personalidad».

La importancia de hablar con el niño

En el caso de los colegios públicos existen igualmente clases de refuerzo que se ofrecen a todos los niños con más dificultades en asimilar la materia. Para la Asociación Nacional de Profesionales de la Enseñanza (ANPE) , «en España no se ha prestado a la repetición la atención que merece», afirma su portavoz, Sonia García. «Se puede abordar de muchas maneras pero indica que el alumno está pidiendo algo y es importante hablar con él y ver qué pasa», añade. Indica la importancia de reforzar en Primaria Lengua, comprensión lectora y Matemáticas, así como reforzar la estructura secundaria. «En estos casos es fundamental la colaboración con la familia para que el alumno se sienta arropado al igual que debe existir comunicación entre distintos cursos y etapas», indica esta profesora.

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