Brasil vive su «ola» de Ómicron y supera las 1.300 muertes diarias

Con una fuerte ola de contagios desde la aparición de esa nueva variante , Brasil es el segundo en número de muertes, después de Estados Unidos, y el tercero en casos después del país norteamericano y de India. La tasa de mortalidad es de 302,2 por cada 100 mil habitantes, con un promedio de muertes por encima de mil desde el comienzo de febrero.

Según Erika de Carvalho, coordinadora general de la Unadig (Unidad de Apoyo al Diagnóstico del Covid-19) de la prestigiosa Fundación Fiocruz, existe un contexto que explicaría esa «explosión de casos», primero, un reflejo de las fiestas de fin del año, y luego, una distensión de las medidas de aislamiento social por el avance de la vacunación, con más del 70% de la población habiendo tomado al menos dos dosis.

«Esto ha hecho que Omicron se expanda e infecte a una gran cantidad de personas. Sabemos que es una cepa cuyo contagio es más fácil y esto explica bien las cifras», dice Carvalho, para quien esta «ola» puede ser estacional. «Aun así, tenemos que observar», refuerza.

De hecho, pese al aumento en este momento, el país está lejos del auge de la pandemia vivido en abril del año pasado, cuando el número de muertes pasó de los 4.200 fallecidos, con un pico de 4.250 reportados el pasado 8 de abril.

La Fundación Fiocruz, que también es responsable por la fabricación y distribución de Astrazeneca en Brasil, informó esta semana que la variante Ómicron responde por más del 95% registrado de Covid19 en las últimas semanas. Según la institución, el dominio de Ómicron en Brasil se consolidó en enero.

Los especialistas concuerdan que eso se debe a las campañas de vacunación, donde casi 154 millones de los 213 millones de habitantes ya están vacunados totalmente, y casi 53 millones, casi el 25% de la población ya recibieron una tercera vacuna de refuerzo. Médicos indican que la gran mayoría de las muertes ocurren entre los no vacunados. En el Hospital Emilio Ribas de São Paulo, referencia nacional de salud pública, el 82% de las muertes ocurrió entre pacientes que no habían completado las dos dosis.

En el estado de São Paulo, que fue pionero en las campañas de vacunación y que produce un inmunizante propio (Coronavac del Instituto Butantã), el gobernador João Doria ya anunció la posibilidad de aplicar una cuarta dosis. La decisión es también parte de una disputa política con el Gobierno central, de Jair Bolsonaro, que se demoró en ofrecer vacunas a la población . El propio Bolsonaro, que asegura no haberse vacunado, es contra la inmunización y a favor del libre arbitrio en este caso.

El Ministerio de Sanidad ha confirmado a su vez, que se han comprobado en Brasil al menos cinco casos de BA.2, una subvariante de ómicron que tiene unas 40 mutaciones diferentes que podría ser más transmisible que la original. Dos de esos casos se registraron en São Paulo y otros dos en Río de Janeiro, y el quinto al sur del país, en el estado de Santa Catarina.