Aído: «No creo que haya una ley del aborto más equilibrada que ésta»

La mujer que quiera someterse a un aborto tendrá tres días para reflexionar sobre su decisión , ya que, previamente, su médico le habrá entregado un sobre con información sobre sus derechos y sobre las ayudas de que puede disponer para la maternidad si tal fuera su decisión. De este modo, según la ministra, se «garantiza a las mujeres la posibilidad de tomar una decisión libre e informada sobre la interrupción del embarazo dentro de las primeras catorce semanas».

De manera excepcional, hasta la semana 22, la mujer podrá abortar sólo en dos supuestos: si estuviera en riesgo la vida o la salud de la embarazada o si hubiera graves anomalías en el feto . En los dos casos, deberá acompañar un dictamen emitido por dos médicos especialistas distintos a los que practican la intervención. A partir de aquí sólo un comité clínico podrá autorizar una interrupción a petición de la embarazada cuando se detecten anomalías fetales incompatibles con la vida o una enfermedad extremadamente grave e incurable. Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha asegurado que la nueva ley del Aborto «busca salvaguardar la dignidad de la mujer». «Derechos, garantías, seguridad y respeto definen este anteproyecto», ha asegurado De la Vega, quien también ha afirmado que el nuevo texto es «es ponderado y razonado, en línea con la sociedad española», y protege y garantiza los derechos de las mujeres «que afrontan una decisión tan difícil como es abortar».

El documento, que también incluye propuestas de Salud Sexual y Reproductiva, como la venta en farmacias de la píldora postcoital sin receta médica, será ahora remitido a la Fiscalía General del Estado y al Consejo General del Poder Judicial para que emitan sus preceptivos informes, no vinculantes para el Gobierno. Será después del verano cuando el texto definitivo llegará al Congreso de los Diputados con la idea de que antes de que acabe el año se apruebe la nueva norma.