ABC2020, el año del coronavirus
En las tricheras / Las UCI se han transformado en el corazón de los hospitales durante la pandemia. Donde se convive con la soledad de los pacientes, la esperanza, la vida y la muerte - ABC

Lucha

Médicos, enfermeros, conductores de ambulancia, equipos de emergencia, personal de limpieza... El sistema sanitario nunca se preparó para ejercer una medicina de catástrofe pero respondió por la entrega hasta el desfallecimiento de los profesionales que lo integran.

Salvar, cuidar y acompañar

José Eugenio GuerreroJefe de la UCI del Hospital Gregorio Marañón
112, en continua alerta / Los servicios de urgencia médica han luchado cada jornada para mantener viva a la población. Son el cordón umbilical entre el enfermo y el hospital - ABC

La humanidad recordará la primavera de 2020 como la más terrorífica de la Sanidad, con una enfermedad que ha dejado un reguero de sufrimiento y muerte a su paso. La implicación de los sanitarios sobrepasó la medicina para convertirnos en un miembro más de las familias afectadas, puesto que los enfermos estaban solos. La deshumanización de la Covid-19 es abrumadora.

En las Unidades de Cuidados Intensivos nos ha sobrecogido la pérdida de tantos pacientes, algunos compañeros y amigos. A todos hemos tratado de cuidar y salvar, y siempre acompañar con la mayor calidez en esos días tan duros. La segunda ola nos ha enseñado a estar alerta para vencer la enfermedad. No podemos permitir que siga generando tanto dolor en pacientes, familiares y profesionales sanitarios.

Y ahora que vemos cerca, con la vacuna, el fin de la enfermedad, debemos continuar luchando, para que entre todos consigamos no aumentar la trágica lista de muertes.

Arriba: El hospital milagro de Madrid. En solo 29 horas se improvisó el mayor centro sanitario de España para hacer frente a la primera oleada. Abajo, Aplausos y caceroladas. Primero fueron los aplausos a los sanitarios y después las caceroladas por una gestión fallida - Ignacio Gil / Ignacio Gil / Juan Carlos Soler

El espíritu de Ifema

Antonio ZapateroViceconsejero de Sanidad de Madrid

Cuando recordamos pasados unos meses la situación de Madrid en aquellas semanas terribles de marzo, todos teníamos miedo de lo que estaba pasando. Temíamos a una enfermedad nueva y desconocida. Además, veíamos cómo a nuestros hospitales no paraban de llegar pacientes de toda edad y condición con cuadros clínicos muy graves.

Surgió entonces la posibilidad de hacer algo más. Llegamos a Ifema aquella mañana del 21 de marzo un grupo de personas que en muchos casos no nos conocíamos, de todos los niveles asistenciales de Madrid. Aparecieron voluntarios, estaban los militares, el personal de Ifema y entre todos se creó eso que llamamos el espíritu de Ifema que consistió, fundamentalmente, en que trabajando todos juntos por un objetivo común podíamos conseguirlo.

Y se consiguió. Los tres pabellones feriales se convirtieron en un hospital por el que pasaron casi cuatro mil pacientes en siete semanas, consiguiendo ayudar al resto de dispositivos asistenciales y sobre todo a los ciudadanos de Madrid.

El símbolo de la pandemia / Con la salida del último enfermo de Ifema, el país respiró. El primer alivio de una guerra a la que aún quedan mil batallas por librar - Ignacio Gil

Fuerzas Armadas, una baza esencial

Margarita RoblesMinistra de Defensa
Izq: Hospitales de campaña. Militares del Regimiento «Príncipe» n°3, de la Brilat, levantaron el 19 de marzo en el Hospital Universitario Central de Asturias (Oviedo) el primer puesto de socorro para hacer frente a la pandemia. Dcha: La UME fumiga. Uno de los grandes trabajos de los militares fueron las fumigaciones. Como la llevada a cabo en una entrada al metro de Valencia por la Unidad Militar de Emergencias - REUTERS / Mikel Ponce

Durante todo este año, nuestras Fuerzas Armadas, desde el primer mando hasta el último soldado, han estado más cerca que nunca de la ciudadanía, aportado su granito de arena en la lucha contra el Covid.

Junto a otros colectivos, primero en la Operación Balmis y después en la Misión Baluarte, nuestros militares nos han protegido desinfectando residencias, trasladando enfermos y fallecidos, construyendo instalaciones para ayudar a los más vulnerables, realizando labores de rastreo y todo ello con un único objetivo: salvar vidas. En esta labor de preservar la seguridad y bienestar de los españoles frente al Covid, la planificación, organización, capacidades y experiencia de las Fuerzas Armadas en situaciones de crisis ha posibilitado que los militares actuasen de forma rápida y eficiente, allí donde fueron requeridos, alejados de cualquier connotación política.

Nuestras Fuerzas Armadas han demostrado que son esenciales, hoy más que nunca, para enfrentarse a las múltiples amenazas que nos acechan con el objetivo de mantener esa vida normal, cotidiana, que tanto hemos echado de menos durante este año.

No puedo expresar con palabras el sentimiento de orgullo que he sentido durante todos estos meses al ver a nuestros soldados trabajando sin descanso en apoyo a nuestros ciudadanos. Un apoyo que no ha pasado desapercibido para todos los españoles que se han sentido, al igual que yo, muy orgullosos de sus Fuerzas Armadas. Su compromiso, generosidad, humanidad y entrega les hace seguir trabajando con más fuerza cada día y con la ilusión ya puesta en un 2021 esperanzador, donde todos juntos hayamos superado esta pandemia.

Residencias abandonadas

Ignacio Fernández CidPresidente de la Federación Empresarial de la Dependencia
La trampa mortal / 20.268 personas murieron por Covid en residencias de la tercera edad durante la primera ola. En la imagen, voluntarios del cuerpo local de bomberos fumigan una de ellas en Soria - Olmo Calvo

El mundo sucumbió al virus y nuestro país, por desconocimiento o imprudencia, todavía más. La Covid campó a sus anchas por hospitales colapsados y residencias de mayores abandonadas a su suerte, mientras los profesionales hacían de tripas corazón y se batían el cobre a pecho descubierto en la lucha contra la pandemia.

Buena parte de la clase política revelaría la pasta de la que estaba hecha y pondría a las residencias a los pies de los caballos con declaraciones sesgadas y el delirio demagógico del vicepresidente segundo del Gobierno.

Medidas preventivas / Las residencias se adaptaron, como la de Casablanca Villaverde (Madrid) para evitar contagios por Covid-19 - Isabel Permuy

Entretanto, un cúmulo de protocolos sanitarios dictados desde el desconocimiento absoluto del sector, imponían obligaciones de imposible cumplimiento. Y aquí seguimos, al pie del cañón, transitando por 17 nuevas normalidades, pero con la experiencia de lo aprendido, mejor protegidos y con la esperanza de que la vacuna, que se administrará prioritariamente en residencias, suponga un avance en la superación de la enfermedad.

Arriba: Una sociedad civl unida ante un objetivo común. Según se iba a agravando la crisis del coronavirus en España, la ola de solidaridad se fue expandiendo. En la imagen, tractores de Asaja (Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores) desinfectan distintas zonas de Córdoba. Abajo, izq: La Iglesia en tiempos de pandemia. La solidaridad traspasó incluso los gruesos muros de los monasterios para poder ayudar a los afectados por la crisis sanitaria. Abajo, dcha: En el ADN de España. Ante la escasez de equipamiento médico en los hospitales, la planta de SEAT en Martorell (Cataluña) pasó en cuestión de días de producir coches a fabricar respiradores - Valerio Merino / ABC / ABC

Solidaridad

Javier SenentPresidente de Cruz Roja

Solidaridad es un término íntimamente unido al de humanidad, entendido como la preocupación que sentimos por las personas y por buscar soluciones para mejorar sus vidas y uno de los siete principios de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja que rigen nuestro trabajo.

Héroes ciudadanos sin salir de casa / La fraternidad y la generosidad afloraron en una sociedad que se unió ante la emergencia sanitaria - ABC

La crisis provocada por el Covid-19, diferente a cualquier otra crisis vivida, nos ha demostrado también hasta dónde podemos llegar movidos por la solidaridad. Con nuestro plan Cruz Roja Responde frente al Covid-19 hemos sido capaces de aunar voluntades y vivir una explosión de solidaridad emocionante gracias a la que hoy ya hemos protegido, acompañado y ayudado a 3 millones de personas, en todos los ámbitos, llegando desde el primer momento hasta el último rincón, de puerta a puerta, de persona a persona.

Solidaridad, un término increíblemente arraigado en la sociedad española, en el que sin duda en estos meses hemos profundizado en su significado.

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