Proponen al Papa que el banco Vaticano no tenga «clientes laicos»

Al termino de la reunión a puerta cerrada, el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, afirmó que “la comisión hizo una presentación muy amplia y articulada sobre la realidad del IOR, sus problemas pasados, la interpretación de sus causas y la situación actual. Ha indicado también algunas orientaciones”.

En esa misma línea genérica, el portavoz añadió que la comisión presidida por el cardenal Renato Faina y coordinada por el arzobispo español Juan Ignacio Arrieta, presentó como importante “profundizar en la misión del Instituto en la perspectiva del servicio religioso y pastoral de la Iglesia”. Es decir, evitar el uso del banco por los llamados “clientes laicos”, que ha dado lugar a tantos escándalos, limitando las cuentas corrientes y el servicio de gestión de patrimonio exclusivamente a organismos del Vaticano, diócesis y órdenes religiosas.

Los cardenales “agradecieron la presentación y realizaron algunas preguntas” pero, según subrayó Lombardi, “no se ha tomado ninguna decisión”. El motivo es el método de trabajo, que obliga a poner sobre la mesa todas las piezas del complicado “puzzle” económico-financiero del Vaticano antes de tomar decisiones sobre cada una de ellas.

El cuadro presentado por las dos comisiones investigadoras se completará hoy miércoles con una exposición a cargo del comité de 15 cardenales -creado por Juan Pablo II- que asesora al Papa sobre los “problemas económicos y organizativos del Vaticano”. Su principal tarea consiste en estudiar los presupuestos y revisar los balances de cada año, tanto de la Santa Sede -es decir, los organismos jurisdiccionales de la Iglesia universal- como del Estado del Vaticano –o sea, los edificios, jardines, Gendarmería, nunciaturas, etc.-.

El “maratón” del Papa y su “consejo de ocho cardenales” durante tres días debería dejar “visto para sentencia” el capítulo económico-financiero, de modo que la cuarta reunión del grupo, a finales de abril, permita abordar de lleno la reorganización de la Curia, que es su tarea principal.

La decisión respecto al reajuste de las entidades económicas corresponde exclusivamente al Papa, y su portavoz sugirió que llevará tiempo. A la reunión de abril seguirán probablemente otras. La dificultad para pasar a la práctica y el hecho de que hasta ahora el trabajo se haya concentrado en el estudio, sin ninguna medida concreta, empieza a crear un clima de preocupación .