El hermano de Benedicto XVI asegura que el Papa emérito se siente «aliviado» desde que dejó el cargo

Según estas declaraciones, Benedicto XVI se encuentra muy a gusto en Castel Gandolfo, el retiro de verano papal al que se trasladó después de dejar su cargo en el mes de febrero.

Georg Razinger, de 88 años de edad, se trasladó a esta residencia desde Alemania para celebrar el 86 cumpleaños del Papa emérito, el pasado 16 de abril. Según recoge este miércoles la prensa, tras el encuentro ha afirmado que «todavía sufre los problemas de la iglesia, pero está realmente aliviado de no tener el peso de la iglesia sobre sus hombros».

Desde el Daily Telegraph aseguran que tras una conversación telefónica desde su domicilio en Regensburg, en Padre Ratzinger negó que el Papa sufra de dolencias importantes, aunque «es muy viejo, no tiene ninguna enfermedad en particular, pero él se está debilitando debido a su edad». En concreto, ha confirmado que cuando anunció su renuncia tenía problemas con el oído y con la vista. En ese momento también se supo que hacía unos diez años se le había puesto un marcapasos.

Georg y Joseph Ratzinger mantienen una estrecha relación, y semanalmente mantienen conversaciones telefónicas.