Salud
Qué es la hepatitis A: cuáles son los síntomas y cómo se contagia
Esta inflamación del hígado es motivo de preocupación actualmente por su transmisión a través de un cargamento de fresas de origen marroquí
La partida de fresa marroquí con hepatitis alarma al sector agrícola de Andalucía
Sevilla
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Iniciar sesiónLa noticia que alertaba de la presencia de hepatitis A en un cargamento de 1.500 kilos de fresas procedente de Marruecos ha sembrado preocupación entre los consumidores por la relación entre esta alerta y Andalucía, dado que el importador es de Huelva ... y el distribuidor, de Sevilla.
Aunque la fruta afectada no ha llegado a comercializarse desde que entró en nuestras fronteras a través del puerto de Algeciras, es cierto que hay alimentos que pueden transmitir la hepatitis A, y hay muchas personas que se preguntan cómo se contagia y cuáles son los síntomas de esta enfermedad.
Se trata de una inflamación del hígado debida al virus de la hepatitis A (VHA). Este se propaga sobre todo cuando una persona no infectada ni vacunada consume agua o alimentos contaminados por heces de una persona infectada. Su contagio puede relacionarse con la ingesta de agua y alimentos insalubres, un saneamiento deficiente, la mala higiene personal y las relaciones sexuales bucoanales. No se contagia por contacto fortuito.
Esta modalidad no causa hepatopatía crónica, pero sí que puede ocasionar síntomas debilitantes y, muy raramente, hepatitis fulminante (insuficiencia hepática aguda), que puede ser mortal. Según las cifras que maneja la Organización Mundial de la Salud (OMS), las muertes por hepatitis A constituyen el 0,5% de la mortalidad por hepatitis víricas en todo el mundo.
Epidemias de hepatitis A
La aparición de la hepatitis A suele darse de forma esporádica y en epidemias de ámbito mundial, y tiende a reaparecer periódicamente. Los brotes asociados con agua o alimentos contaminados pueden surgir de forma explosiva. La OMS recoge el ejemplo de la epidemia registrada en Shanghái en 1988, que afectó a unas 300 000 personas.
Estos casos también se pueden dar de forma prolongada y afectar a la población durante meses pasando de persona a persona. Los virus que causan la hepatitis A subsisten en el medio y pueden resistir a los métodos que se utilizan habitualmente en la producción de alimentos para inactivar o controlar las bacterias patógenas, por lo que el control y las medidas higiénicas y preventivas son cruciales en el sector de la alimentación.
Sintomatología de la enfermedad
El período de incubación de la hepatitis A desde su contagio suele ser de entre 14 y 28 días. Los síntomas van de moderados a graves y pueden incluir fiebre, malestar, pérdida de apetito, diarrea, náuseas, molestias abdominales, coloración oscura de la orina e ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos). No siempre aparecen todos esos síntomas.
Cuando se da en adultos, los síntomas tienden a aparecer con mayor frecuencia que en los niños. De hecho, la gravedad y la mortalidad de la enfermedad aumentan con la edad. Los menores de seis años infectados no suelen experimentar síntomas apreciables, y solo el 10% presentan ictericia. En ocasiones, la hepatitis A puede reaparecer con otro episodio agudo después de la recuperación, aunque, por lo general, termina desapareciendo.
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