El doctor Fernando Fabiani explica qué le ocurre a nuestro cuerpo al tomar pastillas para dormir: «Pueden servir como parche»

El estrés, la ansiedad, la depresión, el consumo de cafeína o alcohol, el uso excesivo de pantallas o los horarios irregulares son algunas de las causas más frecuentes que provocan los trastornos del sueño. Como remedio, muchas personas optan por medicamentos que ayudan a dormir; sin embargo, el doctor Fernando Fabiani desaconseja este tipo de solución prolongada en el tiempo por lo que le ocurre a nuestro cuerpo.

Fue en el programa 'Despierta Andalucía', de Canal Sur, donde el doctor Fernando Fabiani expuso los contras de tomar medicamentos para conciliar el sueño: «Las pastillas para dormir son medicaciones que pueden servir como parche. Temporalmente puedo coger el sueño, pero tienen un problema que tienen algunos medicamentos«, comenzó diciendo.

Uno de los problemas que tienen las pastillas para dormir «es la tolerancia, que mi cuerpo se va acostumbrando. Y, por lo tanto, esa pastilla que a lo mejor me ayuda a dormir hoy, si yo la tomo de manera continuada, no sería raro que dentro de tres, cuatro semanas o dos meses le diga a mi médico 'mándame algo más fuerte, que esto ya no me hace nada'. Necesitamos subir la dosis«. Asimismo, un segundo problema es »la dependencia. Cuando yo llevo mucho tiempo tomando una medicación para dormir, y esto empieza a ocurrir a partir de las dos o tres semanas, mi cuerpo se acostumbra a dormir bajo los efectos de ese medicamento. Por lo tanto, el día que quito el medicamento no hay manera de dormir, aunque la causa que en su momento produjo el problema del sueño haya desaparecido«.

Este profesional concluyó su explicación poniendo un ejemplo: «Resulta que yo, imaginaos, tengo un problema de mucho estrés, de problemas laborales... Mil circunstancias que entendemos que, a veces, nos pueden afectar al sueño. No hay manera de dormir y la pastilla me ayuda a dormir. Yo me pego tomándome la pastilla tres meses, el problema laboral o de estrés se resuelve, pero ahora yo me he acostumbrado a dormir con la pastilla y ya sin la pastilla no pego ojo«.