La tragedia de Coria eleva a cinco las víctimas que dejan las borrascas en Sevilla en menos de un mes

Los fallecidos de Coria se encontraban en su puesto de trabajo, una nave agrícola en el cortijo El Sequero que linda con el término municipal de Dos Hermanas, cuando un tornado causó el derrumbe del techo de dicho inmueble. Eran Vicente G. G., el casero de 61 años, su hermano José G. G., de 59, que era el encargado de la nave, y otro empleado, José María V. V., de 40 años. Los hermanos eran naturales de Dos Hermanas, aunque el casero llevabas décadas viviendo en el cortijo. Su mujer se encontraba en la finca cuando se produjo el terrible accidente. El tercer fallecido procedía de Benacazón.

Fue antes del mediodía, sobre las 11.30 horas, cuando el servicio de Emergencias 112 recibió una llamada alertando de que el techo de una nave agrícola se había desprendido de la estructura del edificio. Las cubiertas llegaron de hecho a decenas de metros a la redonda de la construcción. Esta se encuentra aislada en la ribera del Guadalquivir y a varios kilómetros de otras edificaciones.

Según pudo conocer ABC, fue precisamente las malas condiciones meteorológicas la razón por la que estos tres hombres no salieron a trabajar al campo, lo que hizo que sólo estuvieran ellos en el lugar de los hechos. Esto es, aprovechaban un mal día de faena en las tierras para arreglar maquinaria en el interior de la nave. Fue entonces cuando se produjo el derrumbamiento. Normalmente en la finca, propiedad de una empresa agrícola, trabajan una veintena de empleados.

El servicio de Emergencias 112, tras recibir el aviso alertó de lo ocurrido a los servicios sanitarios, Bomberos de la Diputación, que acudieron de los parques de Los Palacios, Dos Hermanas y Sanlúcar la Mayor, Policía Local y diferentes unidades de la Policía Nacional.

El inmueble afectado tenía unos 25 por 20 metros de fachada y fue construido en 1962, según se podía leer en un azulejo ubicado en la pared de la vivienda del casero: «Huerta Nuestra Señora del Carmen. Cortijo Sequero. Marzo 1962».

Una de las preguntas que sobrevolaba ayer entre los periodistas desplazados a la finca era si las techumbres que el viento arrancó eran más actuales. En este sentido el delegado del Gobierno en Sevilla, Francisco Toscano, que se desplazó al lugar de la tragedia junto al alcalde de Coria del Río, Modesto González, aseguró desconocer esta cuestión.

Según ha podido saber este periódico, el cortijo cambió de manos hace más de dos años, siendo vendido por la familia Pérez Saturnino a una empresa agrícola.

El primer objetivo del operativo desplegado en al finca era determinar si había más víctimas. La falta de seguridad del inmueble afectado impidió a la Policía Científica realizar una inspección ocular a fondo. Por ello, el servicio de Bomberos de la Diputación activó un grupo de guías caninos para rastrear los escombros. Al cierre de esta edición no se había producido novedades al respecto.

Un trabajador de la finca en este sentido, trasladó a los periodistas que en la nave no había nadie más. «Escuché el fuerte ruido de las persianas. Cuando me asomé a la ventana, comprobé que el techo de la nave se había desprendido», así narró este testigo lo sucedido.

La Policía Nacional se ha hecho cargo de la investigación policial para esclarecer las causas del incidente, si se debió al mal estado de la estructura de la nave o si por el contrario, fue sólo por el colapso del techo por el fuerte viento. De otro lado, la Inspección de Trabajo ha abierto su propia investigación para verificar si los hechos se puede catalogar como un accidente laboral, ya que los fallecidos se encontraban en su lugar de trabajo o determinar la casuística con la que la normativa lo catalogue.

Ayer por la tarde, la Agencia Estatal de Meteorología no había especificado todavía si fue un tornado el fenómeno meteorológico concreto que provocó la tragedia, aunque fuentes de la Diputación señalaron a ABC que así se trataba. Aunque no con tanta fuerza, el viento continuó durante buena parte de la tarde. El levantamiento del primer cadáver se produjo antes de las 15.30 horas, mientras que los otros dos cuerpos fue algo más tarde. A las 16.00 horas fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal de Sevilla para proceder a las correspondientes autopsias.

Francisco Toscano y Modesto González trasladaron el pésame a la familia de los fallecidos. En su declaración ante los medios, el subdelegado explicó que se procedería a la inspección aérea del lugar mediante drones siempre y cuando el tiempo lo permitiera para cerciorarse de la estabilidad del edificio y de la presencia de más víctimas.

El Ayuntamiento de Coria del Río, decretó un día de luto oficial por la tragedia, mientras que el Consistorio de Dos Hermanas, lugar originario de los hermanos fallecidos, decidió aprobar dos días en recuerdo de las víctimas.