Los ayuntamientos de la provincia de Sevilla, al acecho de los cotillones ilegales

La tragedia del Madrid Arena en 2012, donde murieron cinco chicas y quedaron en evidencia numerosas irregularidades en materia de seguridad, parece que ha calado en las instituciones. Los ayuntamientos sevillanos llevan semanas vigilando de cerca cualquier movimiento de posibles fiestas que se celebren en espacios no autorizados. Hay policías que rastrean internet desde hace días en busca de la pista que les lleve a algún cotillón ilegal.

En el Consistorio de la capital se han realizado más de 1.000 inspecciones en locales de noviembre a diciembre. De todas ellas, 81 han estado relacionadas con celebraciones de fin de año.

Fruto de ese trabajo, en los últimos días se han detectado dos fiestas sin licencia. La última se confirmaba ayer mismo, en la víspera de Nochevieja. El promotor ya ha sido informado que no tiene permiso para la celebración del evento , previsto en un cortijo entre Pino Montano y San Jerónimo. En caso de seguir hacia delante con la fiesta, se expone a que la Policía Local la clausure.

Según ha confirmado una asistente al evento, el cotillón que se ha cancelado es el que se iba a celebrar en el Cortijo Doña María, tal y como le han hecho saber los promotores en la mañana de este 31 de diciembre. Desde el Ayuntamiento han indicado que «se trata de una fiesta prevista en un cortijo ubicado en la zona norte de la ciudad que no cuenta con la preceptiva licencia para actividad ocasional que, de acuerdo con la Ordenanza Reguladora de Obras y Actividades, se requiere para llevarla a cabo».

Un día antes, el Consistorio confirmaba la prohibición de un evento que sus organizadores habían previsto en la finca La Encarnación, un terreno rústico en Pino Montano donde no están autorizadas este tipo de actividades. Si bien los organizadores han reubicado el cotillón para no perder las más de 2.000 entradas que ya llevaban vendidas a principios de esta semana.

En la comarca más próxima a la capital no se esperan fiestas con gran afluencia o al menos no han sido comunicadas oficialmente. El principal evento por el numeroso público que va a asistir, está controlado por el Ayuntamiento ya que es una convocatoria municipal. Se trata de la fiesta que se va a desarrollar en la Hacienda La Alquería de Tomares. Por otro lado, en Mairena del Aljarafe y en el resto de poblaciones no hay previstas grandes aglomeraciones, pero sí se pondrá especial vigilancia para echar el cierre a las fiestas «ilegales» y se prestará mucha atención a la presencia de menores.

Hay autorizados dos cotillones que van a celebrarse en espacios que ya cuentan con la categoría de sala de fiestas y reúnen, por tanto, todos los requisitos de seguridad, según confirman fuentes municipales. Es el caso de la fiesta que va a organizar la discoteca B3 , donde se espera una gran afluencia que llenen las tres salas del local; y la Hacienda Doña María, donde pasarán la última noche del año entre 400 y 500 personas.

La Policía Local lleva semanas «rastreando» las redes sociales para detectar fiestas que no cuenten con las licencias correspondientes, ya que la gran mayoría de estos eventos aprovecha la red para publicitarse. Por el momento, no se han registrado incidencias en este sentido, aunque el año pasado el Ayuntamiento sí clausuró un cotillón, que iba a celebrarse en el edificio San José, por «falta de documentación», llegando la organización de la misma a tener que devolver algunas entradas que ya habían sido vendidas.

Desde el Consistorio informaban que sólo se han expedido permisos para los cotillones anunciados en los salones de celebraciones conocidos como Hacienda La Caridad (en la carretera de Mairena del Alcor), Hacienda Guadapule (en las inmediaciones de la SE-40), y Hacienda La Albaraka (en la zona de El Nevero). También se prevén numerosas celebraciones en locales de ocio nocturno, que ya disponen de «su perceptiva licencia y cumplen con la normativa que se les exige de seguridad, aforo, seguros, medidas contra incendios, evacuación...»

El Ayuntamiento ha publicado un edicto con las normas para las fiestas de fin de año en el que se recogen una serie de requisitos para su celebración en el caso de que tengan lugar en locales que no tienen licencia previa para la organización de este tipo de actividades.

No podrán realizarse en locales que estén ubicados en edificios donde existan viviendas o que colinden con ellas y deberán llevarse a cabo actuaciones para garantizar la seguridad de los asistentes . No se ha comunicado ningún evento que se vaya a celebrar fuera de los espacios habituales de ocio nocturno.

En el municipio astigitano hay anunciadas y tienen los permisos en regla cuatro fiestas de cotillón . La más grande se prevé en el salón de celebraciones Goga, en el Polígono El Limero, y las otras tres en discotecas. Todas se organizan en locales que cumplen la normativa para este tipo de celebraciones y no precisan permisos especiales.

En el caso de Osuna, al igual que en Alcalá, no se ha comunicado ningún evento de fin de año y las celebraciones habrá que buscarlas en los bares de la localidad.

Información elaborada por: Alberto mallado, Laura Montes, Natalia Ortiz, Borja Moreno, Ángela Lora