La atracción de la Feria de San José es la misma donde murió electrocutada una niña en 2014

Las sospechas de que se trataba del mismo aparato saltaron a las pocas horas del incidente , ocurrido a la 1.50 de la madrugada del pasado sábado. Sólo había que comparar las imágenes con las que se tomaron hace cinco años en Los Palacios para comprobar que se trataba de la misma tipología, diseño e incluso compartían los mismos dibujos del decorado que rodea a la olla. Tan sólo cambiaban algunos elementos externos y el nombre. La olla donde murió la niña Alba se llamaba «Caiga quien Caiga».

Las evidencias eran claras pero no había confirmación oficial . Ni siquiera el Ayuntamiento, que ha anunciado que se personará como acusación, obtuvo esa información durante las horas posteriores al siniestro.

La Guardia Civil inició de inmediato una investigación. El equipo de Policía Judicial de La Rinconada realizó el mismo sábado por la mañana una inspección ocular de la atracción, que quedó precintada. En ese momento, el Consistorio había paralizado la actividad en el recinto ferial pero después reabrió la zona de las atracciones tras efectuar una nueva inspección a todos los equipos.

Los agentes de la Benemérita han tomado manifestación al administrador de la sociedad propietaria de la atracción, que ha confirmado que su empresa la adquirió en 2017, tres años después del accidente mortal de Maribáñez . La olla acumula así dos siniestros graves en cinco años y un saldo de un muerto y 29 heridos . De los últimos lesionados, sigue hospitalizada en estado grave una niña de 13 años que ingresó el sábado con un traumatismo craneoencefálico en el hospital Virgen del Rocío. También sigue ingresado otro menor en el Macarena. Son los últimos de una lista compuesta en su mayoría por menores de edad.

El pasado sábado, la olla se partió en dos cuando comenzaba a girar con fuerza en mitad de un viaje. El momento del accidente fue grabado por personas que estaban en el recinto ferial junto a la atracción. Gracias a ese material se pudo ver cómo la estructura central, donde se ubica la bancada donde van sentados los pasajeros, se rompió a la mitad y los jóvenes que estaban situados en esa zona salieron despedidos. La olla siguió girando con el resto de pasajeros. Conforme fue reduciendo la velocidad, las personas, en pleno ataque de pánico, saltaron.

En la primera inspección ocular se observó que la pieza que cayó al suelo se había desprendido de la estructura. Esto pudo deberse a un mal montaje o al estado de los elementos que sirven para unir las piezas de la estructura principal. Fuentes consultadas por ABC confirman que la Guardia Civ il va a incorporar a su informe el análisis de un perito especialista externo, que analizará el rendimiento de los materiales y de la maquinaria que conforman la atracción.

Uno de los heridos relató a ABC horas después de lo ocurrido cómo notó un fuerte latigazo y al instante salió despedido . También reveló que algunos usuarios habían avisado de fallos en la atracción los días previos. Algo muy parecido ocurrió en 2014, cuando días antes del fatal accidente, varias personas advirtieron que habían sufrido pequeñas descargas cuando estaban montado en la atracción. Alba murió electrocutada cuando bajaba de la olla junto a su prima. Recibió una fuerte descarga de tal intensidad que al agarrarse a su familiar ésta también recibió una sacudida. El informe técnico realizado tras la muerte de la menor determinó que la causa del accidente estuvo en una deficiente instalación eléctrica. El cuadro carecía de aislamiento y había«defectos» en la toma de tierra. Los técnicos concluyeron que no reunía las condiciones de seguridad adecuadas para que la atracción estuviera en funcionamiento.