Le mete fuego a un bar de Los Palacios por no haber mayonesa para su montadito

-«¿Me puedes traer mahonesa o kétchup?».

-«No, caballero, este establecimiento es una cafetería y solo disponemos de los montaditos que ya vienen elaborados previamente, por lo que no tenemos mahonesa ni ketchup».

Tras el breve intercambio dialéctico, el hombre, de unos cincuenta años, que estaba acompañado por su hijo y un compañero de trabajo, abandonó la mesa y se dirigió a la gasolinera de Repsol que se encuentra a escasos 50 metros.

Apenas 5 minutos después regresó a la cafetería con una botella de agua de litro y medio rellena de gasolina y accedió al interior del local para volver a preguntar a los camareros de la barra si tenían mahonesa o kétchup. Tras recibir la misma respuesta, el hombre rocía la barra con el combustible y le prende fuego con un mechero, provocando unas llamas de considerable envergadura, y abandona el lugar.

La rápida reacción de uno de los camareros, que usó uno de los extintores con los que cuenta el establecimiento, y la posterior actuación de los bomberos, evitó que el incidente terminara en una auténtica desgracia, ya que Las Postas estaba prácticamente lleno, con una cifra considerable de personas mayores y niños pequeños.

No obstante, el establecimiento ha sufrido diferentes daños en máquinas y la pintura del local. Además, cabe mencionar que lógicamente el episodio generó una estampida por parte de todos los clientes que se encontraban en este conocido negocio, viviéndose momentos de intenso nerviosismo hasta el punto de que hubo que atender a una de las camareras por un ataque de ansiedad.

Minutos después fue detenido por agentes de la Guardia Civil en la cercana Plaza de Andalucía tras una breve persecución de los camareros y la ayuda de dos viandantes que lograron retenerlo.

El protagonista de este sorprendente suceso, que según ha podido saber este periódico cuenta con antecedentes penales, ha pasado a disposición judicial tras ser atendido en el centro de Salud Nuestra Señora de las Nieves por quemaduras en su brazo izquierdo originadas por la deflagración del fuego que él mismo provocó.

El propietario de Las Postas, José Antonio Caballero, conocido empresario hostelero como 'Liebre', no sale de su asombro: «Cuando se da la circunstancia de que hay una discusión o un problema, en caliente pueden ocurrir cosas, pero que de repente, por el simple hecho de que no tenemos mahonesa o ketchup, a un hombre se le crucen los cables hasta el punto de prender fuego a una cafetería me parece alucinante, algo que no alcanzo a entender por más vueltas que le doy».

Caballero estima que el cierre del negocio por culpa de este lamentable episodio ha supuesto una pérdida en la facturación de entre 7.000 y 9.000 euros. Tras pasar toda la noche cambiando máquinas y adecentando la zona del lugar de los hechos, Las Postas ha podido abrir esta mañana con total normalidad.