Investigan las amenazas a la médica de Badolatosa a la que le pincharon las ruedas del coche

La dirección del Área Sanitaria ha mostado su «apoyo» y« acompañamiento» a esta profesional y ha convocado a todos sus efectivos a una concentración para mostrar su «absoluto rechazo a este tipo de agresiones» este martes a las 12 horas «en la puerta de todos los hospitales, centros de salud y consultorios que integran el área sanitaria», recogen dice el Servicio Andaluz de Salud (SAS) en un comunicado.

«En los últimos días, la profesional ha sido objeto de pintadas que han aparecido tanto en el centro de salud, como en su vehículo, instándola a que se marche de la localidad, con el impacto psicológico que este tipo de actos amenazantes conlleva», reconoce el organismo sanitario.

El gerente del área, Celso Ortiz, así como el subdirector médico, David Paniagua fueron este lunes a la localidad de Badolatosa para mostrarle todo su apoyo a la médica y se sumaron a la concentración organizada por el tejido asociativo de la localidad. Durante el acto, el gerente del área habló de «la injusticia de este tipo de actos dirigidos a profesionales que están haciendo un esfuerzo sobrehumano por cuidar de nuestra salud», además de hacer hincapié «en las consecuencias sobre la disponibilidad de profesionales sanitarios en esta zona de difícil cobertura», recoge el comunicado emitido por el área sanitaria.

Estos sucesos en zonas de difícil cobertura como la sierra Sur de Sevilla desaniman a los profesionales que aceptarían a una plaza en dicho centro de salud y que desisten de su idea cuando conocen estas noticias. El Área Sanitaria esperaba cubrir esta misma semana una plaza vacante en ese centro de salud.

El Área Sanitaria ha activado el protocolo de agresiones del SAS, a través del que se ofrece a la profesional afectada asesoramiento tanto psicológico como jurídico, además de iniciar la fase de investigación por parte de la Guardia Civil. «La importante labor que realizan nuestros profesionales sanitarios, comprometidos con la salud de la ciudadanía y la necesidad de garantizar su seguridad durante el ejercicio de su profesión«, destaca Ortiz.

El SAS recuerda que la agresión física o intimidación grave contra personal sanitario en el ejercicio de su función pública asistencial viene siendo considerada como delito de atentado por los tribunales de justicia, y así se han dictado sentencias en estos casos, castigándose con penas de uno a tres años de prisión. El Plan de Prevención y Atención de Agresiones de la Consejería de Salud y Consumo tiene como objetivo intentar reducir este tipo de agresiones, así como minimizar sus consecuencias a través del asesoramiento y acompañamiento de las personas afectadas.