Patrimonio
Un convento para albergar el museo de la Semana Santa de Sevilla
El Ayuntamiento creará una mesa de trabajo para buscar un edificio con valor patrimonial y rehabilitarlo para acoger la exposición
Javier Macías
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Iniciar sesiónEl Ayuntamiento de Sevilla está decidido a poner en marcha el museo de la Semana Santa . Después de descartar la construcción de un nuevo edificio en el solar de la Torre de la Plata debido a la protección patrimonial del espacio, ... el gobierno municipal plantea ahora que este centro de interpretación de las hermandades y cofradías de la ciudad se ubique en un convento o, en su defecto, en un edificio con valor patrimonial que se pueda rehabilitar para ello.
El delegado de Gobernación y Fiestas Mayores, Juan Carlos Cabrera , aseguró en una entrevista en PTV que, tras el éxito de las exposiciones celebradas en la Cuaresma de 2021, el espíritu de rescatar este proyecto «está en los deseos de este Ayuntamiento» y que «Sevilla necesita un museo de la Semana Santa». Según indicó, «con ello las hermandades tendrían un modo de financiación aparte de la Carrera Oficial , y serviría de potenciación cultural de la ciudad. Es una asignatura pendiente de Sevilla». En este sentido, el delegado dejó claro que «el mejor escenario es un convento».
Por otro lado, fuentes municipales han asegurado a ABC que este asunto se abordará en la mesa de trabajo que se va a constituir sobre este proyecto que, antes que nada, tiene que contar con el apoyo del conjunto de las hermandades, que hasta la pasada Cuaresma no habían mostrado un interés especial en la creación de un museo de la Semana Santa. Esta idea lleva siendo un anhelo municipal desde hace décadas. Hace algo más de medio siglo, las cofradías crearon un museo en tres salones del Hospital de los Venerables , que resultó un fracaso por el desinterés generalizado.
Desde entonces, aunque se han organizado multitud de exposiciones en una diversidad de espacios , no se ha llegado nunca a un acuerdo para encontrar una ubicación donde exponer el patrimonio que atesoran y que, en muchos casos, no está a la vista del público en general.
Espacios descartados
Lo más cerca que ha estado el Ayuntamiento y el Consejo de Cofradías de formalizar el asunto es la iglesia de San Hermenegildo . El gobierno de Juan Ignacio Zoido le ofreció al Consejo, que por entonces estaba presidido por Adolfo Arenas, este edificio renacentista que levantaron los jesuitas para que fuera sede de la institución y sirviera también como sala de exposición. Sin embargo, el coste de la rehabilitación de las cubiertas y de la adecuación como museo -presupuestado entonces en 1,8 millones de euros- se consideró inasumible para éstas y acabó descartándose. Desde entonces, la antigua iglesia duerme el sueño de los justos mientras se plantea, parece que definitivamente, su rehabilitación, sin que aún se haya determinado qué tipo de equipamiento cultural acogerá.
Desechada esta idea, bajo la presidencia de Carlos Bourrellier, el Consejo tanteó junto al entonces portavoz del PSOE, Juan Espadas, aún en la oposición, la posibilidad de adaptar el edificio de Peyré en la calle Francos. Tampoco fructificó. A partir de ahí, se fue desinflando esta vieja aspiración pese a plantear sedes como Santa Rosalía, el Garaje Laverán de Baños o San Clemente. Lo último fue la propuesta del propio Juan Carlos Cabrera para construir un edificio en la Torre de la Plata , para el que incluso había una propuesta en firme de los mismos promotores del Jardín de las Cigarreras, pero que se ha descartado para evitar un problema con los conservacionistas y por el escaso interés de las cofradías.
Lo que ahora propone el delegado es volver a la idea original de encontrar un edificio con valor histórico y artístico, apuntando claramente a «un convento». Aquí se abre ahora un enorme abanico de posibilidades, aunque siempre se ha intentado que este futuro centro de interpretación de la Semana Santa de Sevilla se ubique en un lugar dentro de la zona de influencia turística de Sevilla. Y, por otro lado, sería necesario un acuerdo con la comunidad religiosa que lo habite para que ceda las dependencias y obtener, así, un sostenimiento económico para su supervivencia.
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