José González Quirós, hermano mayor de San Benito: «Valoramos refugiarnos en la Anunciación pero nos dijeron que iba a parar la lluvia»

Sin embargo, González Quirós ha explicado a este periódico que «estuvimos en contacto con Antonio Delgado y nos comentó que la tarde iba a mejorar por lo que decidimos continuar hasta la Catedral» tras el momento en el granizó sobre la ciudad de Sevilla afectando a la corporación de La Calzá y del Cerro del Águila. «Nos aseguraron que el tiempo iba a ser parecido al del Domingo de Ramos con chubascos dispersos y no esperábamos en ningún momento el granizo».

El hermano mayor ha apuntado que «conocía la situación de que no se permitía utilizar el patio de la facultad de Bellas Artes aunque la mejoría del tiempo fue la señal de que decidiéramos seguir haciendo la estación de penitencia». Asimismo, ha insistido en «la ejemplaridad del cuerpo de nazarenos de San Benito que no se descompuso en ningún momento de toda la tarde y la noche». González Quirós ha expuesto además que «una vez llegado a la Catedral y viendo que el tiempo mejoraba, ya decidimos volver a la parroquia».

Con respecto al estado de las imágenes, ha explicado que «en cuanto terminó la estación de penitencia, se revisaron las mismas, así como los enseres y todos están en perfecto estado sin deterioros ni ningún problema». A la hermandad de San Benito le cayó el granizo cuando el misterio estaba en las estrecheces de Javier Lasso de la Vega, el Cristo de la Sangre en la puerta de la facultad de Bellas Artes y la dolorosa en Santa Catalina.

El palio apresuró la marcha en las calles Juan de Mesa, Almirante Apodaca, plaza de San Pedro, Imagen y la Encarnación pero finalmente, la cofradía descartó guarecerse en la iglesia de la Anunciación.

En el caso de la hermandad del Cerro del Águila, su hermano mayor, Manuel Zamora ha comentado a ABC de Sevilla que «cuando nos reunimos antes de salir, valoramos la información que nos llegaba y nos informaron que sobre las 17:00 o 18:00 horas podría llover». «Realmente, calculamos que nos llovió 10 minutos de una estación de penitencia de 14 horas. Por eso, decidimos hacer estación de penitencia porque la otra opción hubiera sido quedarnos en la parroquia», según Zamora.

El máximo responsable de la cofradía ha continuado diciendo que «nos aseguraron que eran chubascos dispersos, que no era el frente que entró en Sevilla el Lunes Santo por la tarde y por eso, decidimos salir». Además, ha expresado que «fue una situación parecida a la que vivimos en 1994 cuando se vivió un Martes Santo similar pero fuimos a la Catedral sin pasar por toda la carrera oficial».

Otro aspecto que ha querido destacar Manuel Zamora ha sido que «los meteorólogos consultados nos dijeron que no había problemas durante la tarde y la noche por lo que por eso, también salimos porque si hubiera sido al contrario, hubiera sido otra la decisión». También y al igual que el hermano mayor de San Benito, Zamora ha destacado «cómo los nazarenos se comportaron y cómo agradecieron ya de madrugada en la entrada de la cofradía la estación de penitencia».

Con respecto a la comprobación de si había habido daños en las imágenes o enseres, Zamora ha explicado que «en cuanto entró, se repasaron y Juan Manuel Miñarro vendrá estos días a comprobar al completo a los titulares pero no se han advertido daños».