Las cofradías de Sevilla aterrizan en el Parlamento Europeo de Bruselas para una exposición sobre arte sacro

Sin duda, será una oportunidad única para mostrar a toda Europa piezas de primer nivel que formarán parte de la exposición, y una ocasión excepcional para llevar el arte religioso de Sevilla para ser admirado en el continente. Esta iniciativa tiene como objetivo principal proyectar el trabajo de los artesanos sevillanos como una industria cultural con potencial exportador.

La imaginería, el bordado, la orfebrería, el dorado, la talla, la cerería, la carpintería, la vidriera, la confección de pelucas, los encajes, la pintura o la elaboración de elementos como el capirote estarán presentes en esta muestra que engoblará a todos los profesionales que trabajan por el arte religioso en nuestra tierra.

Las piezas que formarán parte de esta exposición son de gran envergadura y de gran calidad artística. Éstas son: una parte del palio de Madre de Dios de la Palma del Cristo de Burgos, un respiradero del paso del Señor de Pasión, el Cristo de la Humildad y Paciencia de la Esperanza de Triana, una María del Santo Entierro, el frontal del paso del Cristo de la Sed, una túnica del Señor de la Sentencia y el busto de barro del Señor de la Cena.

El palio de Madre de Dios de la Palma es una de las obras de mayor calidad de la exposición, un conjunto que estar cerca de cumplir un siglo, en concreto en el año 2028.

Eduardo Seco Imberg es el autor de la orfebrería del paso y Juan Manuel Rodríguez Ojeda elaboró el bordado en hilo de oro sobre terciopelo rojo. En la bambalina frontal se presenta el antiguo escudo de la hermandad junto al escudo de armas de Castilla, León y Granada en el centro. Por su parte, la bambalina trasera mantiene una composición similar, aunque sustituye el escudo de Castilla y León por el de la ciudad de Sevilla. Esta obra, realizada por el bordador Juan Manuel en 1928, está bordada en hilo de oro sobre terciopelo. En el centro de la composición se incluye un cuadro que representa a la Virgen con el Niño, santa Isabel con san Juanito y el Espíritu Santo.

El Cristo de la Humildad y Paciencia de la Esperanza de Triana está atribuido a Juan Bautista Patrone en una datación estimada entre finales del siglo XVII y comienzos del XVIII. Se trata de una imagen de talla completa, en bulto redondo, realizada en madera y policromada al óleo.

La imagen aparece sentada sobre una peana con forma de risco. El Señor adelanta ligeramente la pierna derecha respecto a la izquierda y apoya el codo del brazo derecho por detrás de la rodilla, descansando así la cabeza sobre la mano. El brazo izquierdo reposa sobre la pierna del mismo lado. Va provisto de los atributos propios de su iconografía: potencias de orfebrería y una clámide o capa, rematada con encajes de bolillos en hilo de oro.

Habrá una talla de María de Cleofás perteneciente a la hermandad del Santo Entierro en la exposición, una talla ejecutada por Juan de Astorga en 1829, al igual que el restante misterio que forma parte el misterio del Duelo.

El frontal y los candelabros delanteros del paso del Cristo de la Sed formarán también parte de esta muestra. Se trata de un conjunto ejecutado por Manuel Guzmán Bejarano entre 1988 y 1990, realizado en madera de cedro y dorado en pan de oro de 22 quilates, dentro de un marcado estilo neobarroco.

El conjunto presenta cuatro cartelas alusivas a pasajes evangélicos relacionados con la sed de Cristo, además de ocho ángeles y cuatro arcángeles, todo ello obra del imaginero Manuel Carmona. Asimismo, las cartelas están decoradas con pinturas de escenas bíblicas relacionadas con el agua, realizadas por el pintor y ceramista Alfonso Magüesín.

Este conjunto, en un periodo de tres años, como así era aprobado por la hermandad, será terminado en un proyecto a efectuar a lo largo de tres años, es decir, hasta la Semana Santa de 2028.

La Macarena estará representada con una túnica del Señor de Sentencia, la de los cardos, obra confeccionada en hilo de oro a realce sobre terciopelo morado de seda por Juan Manuel Rodríguez Ojeda en 1910.

Por último, la hermandad de la Cena aportará el busto del Señor, realizado entre 1954 y 1955 por Sebastián Santos. Un boceto de barro, cocido y policromado, como paso previo al sacado de puntos para trasladado a la madera y ser el titular de la corporación, una obra habitualmente ubicada en la sacristía de los Terceros.