Manolo Vázquez

Contemporáneo de Antonio Ordoñez , se presentó junto a él como novillero en la plaza de toros de Las Ventas en 1950, habiendo hecho su debut con picadores en la plaza de toros de Ciudad Real dos años antes. Tomó la alternativa en 1951 en Sevilla de manos de su hermano Pepe Luis y en presencia de Antonio Bienvenida .

Su carrera estuvo marcada por sus constantes viajes a América, donde contaba con la veneración del público. Aquí en España tuvo varias épocas de descanso, siendo su retirada más longeva la que se produjo entre los años 1968 y 1981, cuando volvió para doctorar a su sobrino Pepe Luis Vázquez Silva . Lo hizo en presencia de Curro Romero , con el que compartió también la tarde del Corpus de aquel año, que junto a Rafael de Paula vieron salir a hombros por la Puerta del Príncipe al « Brujo de San Bernardo ».

Continuó toreando dos años más, hasta que el 12 de octubre de 1983 puso punto y final a su dilata carrera taurina. Aquella tarde fue, con total seguridad, la de mayor calado en su palmarés. Cortó cuatro orejas en aquel mano a mano con Antonio Chenel « Antoñete ». La apoteosis vivida durante sus tres faenas eclosionó en el momento en que su hijo Manolo bajó al ruedo para cortarle la coleta, tirándose al ruedo toreros, aficionados y seguidores del diestro para llevarlo en volandas por el Paseo de Colón.

En octubre de 1956 contrajo matrimonio con Remedín Gago , hija del apoderado Andrés Gago , quien representó a Carlos Arruza . Juntos tuvieron cuatro hijos. Fue ella la impulsora del monumento que se levantó a su marido frente a la Puerta del Príncipe en el año 2009, estatua que rememora su característico cite de frente con la mano izquierda volandera, sinónimo de la pureza que siempre atesoró.

Perteneció, como toda su familia, a la hermandad de San Bernardo , de la que llegó a ser Hermano Mayor. El día de su muerte, el 14 de agosto de 2005, fue amortajado por las Hermanas de la Cruz quienes le pusieron su túnica de nazareno para ser enterrado.

En el cementerio de San Fernando , donde descansan sus restos, posee un panteón con unas esculturas de bronce, que representan su capote colocado de pie sobre el suelo, y el busto del torero. Presenta por su parte posterior una alegoría a la Real Maestranza y al toreo de este matador, así como las imágenes de las principales devociones a las que se encomendaba.

Fue presidente de Honor de la Fundación Andaluza de Tauromaquia y recibió la Medalla de Oro de las Bellas Artes de manos de los Reyes de España en Granada en 2003, así como la Medalla de Andalucía en 1997.

En la actualidad, un nuevo Manolo Vázquez comienza a abrirse paso en el escalafón novilleril: su nieto Manolito , que debutó en público en octubre de 2017 y que la pasada temporada se presentó en la Real Maestranza en un cartel de relumbrón organizado por la hermandad de la Macarena el 12 de octubre.