Rosario Jiménez Rodríguez: «Veníamos de muy atrás, hemos avanzado mucho»

«Lo primero que debemos tener en cuenta es el punto desde el que partimos en España y Andalucía», indica. En Alemania o en los países anglosajones «la cooperación del sector público y el privado tiene una larguísima tradición ; en nuestro país se han hecho grandes avances en las últimas dos décadas si tenemos en cuenta que es el fruto de un cambio cultural muy rápido que aún debe madurar».

A su juicio se trata de un camino en el que cada actor tiene su propio margen de mejora. En el caso de la Universidad «hace treinta años los investigadores estaban muy ajenos al mundo empresarial, muchos pensaban que era algo que no iba con ellos, ahora están abiertos a atender las demandas de nueva tecnología que procede del mercado y participan cada vez más en programas de colaboración público-privados». Este cambio de mentalidad se ha encontrado con una etapa muy complicada, ya que la crisis de 2008 dañó los presupuestos públicos y en el tejido empresarial ha habido ejercicios en los que lo esencial ha sido atender los gastos más perentorios , con lo cual se ha perdido la visión de largo plazo. «Tenemos que evitar a toda costa que la nueva crisis económica que está ocasionando la emergencia sanitaria vuelva a ralentizar este proceso, sería dar pasos atrás», incide.

Por otro lado, apunta que el sector privado también tiene la obligación de avanzar y poner el foco en el largo plazo. «El pequeño tamaño que caracteriza al tejido productivo de Andalucía hace que numerosas compañías no tengan el músculo suficiente para innovar, de ahí que una estrecha relación con la Universidad sea absolutamente necesaria».

Hay casos en los que el compromiso del investigador va más allá y decide crear una spin off para ir al mercado con el resultado de sus investigaciones. « Hay un interés creciente en algunos grupos por buscar la viabilidad comercial de sus investigaciones , con lo cual se comprometen a emprender con la constitución de una compañía, lo cual conlleva entrar en un escenario distinto». Este tipo empresas basadas en la innovación asumen un riesgo (como todo lo que está asociado con la apuesta económica por el desarrollo de tecnologías emergentes), y asegurar el éxito requeriría del respaldo del capital suficiente para asegurar su viabilidad económica. «Es necesario un escenario de inversión que tampoco está plenamente desarrollado en España, aunque también se están dando pasos adelante».

En la Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación de la Universidad Pablo de Olavide mantienen la relación con aquellas compañías que quieren identificar oportunidades de investigación en la universidad.