Reyes Maroto: «Tenemos que dejar de contar turistas para pensar en la rentabilidad»

Sobre el modo de fomentar el desarrollo de empresas, Maroto se ha referido a los desafíos que ya se plantean en el plan España 2050, en el que se despliegan 50 objetivos para que el país se convierta en una de las regiones más avanzadas de Europa. Entre esos desafíos, la ministra ha citado la productividad, la innovación, la digitalización o la creación de un ecosistema necesario para crear empresas y para ello es fundamental -ha indicado- que haya redes, cluster, Digital Innovation Hubs (DIH)... Maroto ha declarado que esta pandemia ha debilitado algunas actividades, como el turismo, pero ha reforzado el sector exportador, citando como ejemplo la industria agrolimentaria.

«No podemos volver al punto de partida que nos dejó la pandemia. ¿Qué queremos ser en 2050? Hay que incorporar el talento. El reto no es solo recuperar la actividad económica, sino modernizar el modelo productivo y nuestro gran déficit es reindustrializar el país», ha declarado Maroto, quien ha advertido que «también tenemos déficit en el modelo turístico, tenemos que dejar de contar turistas para pensar en la rentabilidad». A su juicio, «la digitalización está cambiando el modelo de negocio y ahí tenemos que dar salto cualitativo».

«El 5% de las empresas absorbe la mayoría de la innovación y nos cuesta hacer la transferencia a la pyme. Ahí tiene un papel el Cedeti (Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial). Desde Industria tenemos algunas líneas para que la I+D+i se desarrolle en el ámbito industrial. Hablamos de añadir valor pero antes de eso hay que innovar», en opinión de la ministra de Industria, Comercio y Turismo, quien cree fundamental c oncienciar a las administraciones de que «la innovación es fundamental para cambiar nuestro modelo productivo».

«No se trata sólo de invertir, sino de modernizar , y ahí el sector privado tiene un papel importantísimo», matiza Maroto, quien recuerda que para los fondos de recuperación el Gobierno ha preguntado al sector privado dónde quiere invertir y a partir de ahí se han diseñado los fondos. «Es importante trabajar en red dentro de Europa y hay que propiciar entorno de colaboración público-privada. Las cadenas de producción globales se han concentrado fuera de Europa y eso nos hace hizo menos resiliente en la pandemia. Es fundamental la soberanía industrial, que va más allá de la industria manufacturera. Europa tiene que aprender estas lecciones de la pandemia».

Otro de los grandes desafíos es, según Maroto, la internacionalización de la pyme. «La pequeña y mediana empresa tiene que estar en el centro de esa política. Hay que invertir en la pyme y todo el plan está configurado de abajo arriba para saber cuáles son las necesidades del tejido empresarial para poder identificar los proyectos. No hay que dejar atrás a la pyme porque el 98% del tejido empresarial son pequeñas y medianas empresas».

Por su parte, Román Arjona, economista jefe de la dirección general de Investigación e Innovación de la Comisión Europea , ha indicado que en Europa nos enfrentamos a desafíos como el cambio climático, el envejecimiento poblacional y las megatendencias, como la digitalización, que redefine la relaciones entre los ciudadanos y el modelo económico. «La Covid ha amplificado estos desafíos y ha creado desigualdades sociales y polarización económica», ha añadido Arjona, quien subraya que «el ADN de la innovación al que nos enfrentamos no tiene nada que ver con el de hace diez años por la celeridad en la redefinición de modelos económicos» y porque «las innovaciones surgen entre distintas tecnologías, entre lo física y lo digital, entre distintas disciplinas científicas...

Alerta Arjona de que «estamos lejos en inversión empresarial en I+D+i», por lo que hay que acortar esa brecha». Asimismo, advierte de las dependencias estratégicas industriales, «que-a su juicio- tiene gran importancia a la hora de definir los procesos de innovación y en los planes de resiliencia». Así, ha indicado que de 5.200 productos en los que la UE tiene comercio con otros países, en 137 tiene gran dependencia estratégica y de ellos, el 52% de ellos vienen de China seguida por Vietnam, Brasil y Estados Unidos. Además, la Comisión Europa ha detectado 34 productos difíciles de sustituir, relacionados con industrias intensivas en energía, campos de la salud (ligados a la Covid, material protección...) y materias primas ( tierras raras).

También ha intervenido en este foro Carina Szpilka, del fondo de capital riesgo K Fund y exCEO de ING en Francia y España , quien ha valorado positivamente el plan España 2050, «porque uno piensa que eso está muy lejos pero para llegar a ese ejercicio hay que empezar hoy». Para fomentar un ecosistema de emprendedores, Szpilka ha pedido más financiación para empresas en etapas de crecimiento. En cuanto a la regulación, ha aplaudido la Ley de Startup, si bien ha denunciado un exceso de regulación según donde se esté. «A veces ese exceso de regulación ejerce de freno por exceso», ha declarado esta experta en 'capital venture', quien critica la falta de transferencia tecnológica de la Universidad a las empresas. «Yo veo 1.700 proyectos al año y me llegan pocas iniciativas de la Universidad».

En cuanto a las trabas que encuentran los emprendedores en España, la responsable de K Fund ha manifestado que no sólo falta financiación para épocas de crecimiento, sino también talento. «Falta gente que sepa de tecnología. Muchas veces no sabemos ni qué tecnologías tenemos a nuestro alcance para poder hace cosas y nos falta gente que sepa usar esas nuevas tecnologías. Hemos firmamos un acuerdo, por ejemplo, para enseñar a los profesores a programar para que ellos enseñen a los niños porque hay cosas que hay que hacerlas desde la infancia».