Grandes empresarios andaluces piden que los fondos europeos impulsen sectores que ya son líderes

La jornada ha contado con la participación institucional de Juanma Moreno , presidente de la Junta de Andalucía; una intervención telemática de Inés Bardón , secretaria de Estado de Hacienda; Juan Bravo , consejero andaluz de Hacienda y Financiación Europea; Pilar Blanco-Morales , vicepresidenta y de Hacienda de la Junta de Extremadura; y Daniel Calleja , director general del servicio jurídico de la Comisión Europea, que intervino de forma telemática desde Bruselas.

La visión empresarial la han aportado los presidentes de cuatro de las compañías más importantes de Andalucía, Ángel Haro, de Prodiel ; Dámaso Quintana , de Cunext Group; Ignacio Osborne , de Grupo Osborne; y Manuel Contreras , de Grupo Azvi.

Los Next Generation o fondos europeos para la reconstrucción tras el Covid se presentan como «una oportunidad única para transformar nuestro modelo productivo», según ha asegurado la secretaria de Estado de Hacienda, que ha detallado los diferentes instrumentos de financiación que la Comisión Europea ha puesto en marcha y ha enumerado las comisiones y conferencias sectoriales que se han creado para decidir el reparto del dinero: 140.000 millones para España en forma de ayudas directas y créditos.

Inés Bardón ha precisado que el criterio de reparto no será territorial, sino que se primará « la capacidad que tengan los proyectos para transformar el país en su conjunto ».

Antes de esta exposición, en la mesa de debate de los empresarios, Ignacio Osborne ha afirmado que «hoy por hoy un empresario no sabe qué papel tiene que presentar y en qué ventanilla» para conseguir que su proyecto opte a esta financiación europea. El presidente de Osborne considera que en el mes de abril, que es el plazo que ha marcado el Gobierno para ofrecer esta información, «tendremos muy poco tiempo para que los proyectos vayan a Bruselas».

«Pido a la Administración una sola cosa que es simplificación», ha señalado el empresario bodeguero, que ha llegado a afirmar que en medio del gran organigrama administrativo de España «necesitamos un ministro, un consejero y un concejal de simplificación », que agilicen los trámites empresariales para que se puedan acelerar los proyectos de inversión.

El planteamiento de Manuel Contreras se ha enfocado a la necesidad de que todos rememos en la misma dirección. El presidente de Azvi se ha quejado de que en España «tenemos una clase política que va a lo suyo» , como si vivieramos en «la aldea gala» tirando cada uno para su pequeña parcela, como ha sucedido, ha apuntado, con el centro logístico militar que finalmente se ubicará en Córdoba frente a Jaén.

En este sentido, Contreras ha pedido a los políticos que están en los gobiernos y tienen que decidir sobre los proyectos de futuro « que se olviden de sus partidos un poquito y hagan brazos todos con todos para empezar a ver cuáles son las necesidades de la empresa andaluza» y «que sean capaces de llevar nuestras necesidades a Madrid y a Europa».

Sobre los criterios para elegir los proyectos con más posibilidades de lograr el respaldo de Bruselas tengan, los empresarios que han participado en la jornada de Cesur han coincidido en que hay que apoyar sectores tractores para que el impacto de las inversiones se multiplique en forma de riqueza y empleo de calidad.

« En Andalucía no hay más de 20 empresas que facturen más de 100 millones y eso es patético. En cualquier polígono de salida de Madrid, Valencia o Bilbao hay más. Esta tierra necesita cien empresas de más de mil millones, pero no hay ni cinco», ha apuntado el presidente de Azvi, constructora multinacional sevillana.

En este sentido, Contreras ha afirmado que le preocupa esta escasez de grandes compañías que tengan su sede en Andalucía porque obliga a la mayoría de los jóvenes universitarios a salir a trabajar fuera para prosperar. «Tenemos que ver cómo colaboramos con la administración para que las empresas dupliquen su tamaño porque para salir al exterior es importantísimo tener una cierta dimensión», ha subrayado.

En esta misma línea, Dámaso Quintana, el presidente de la multinacional cordobesa del cobre Cunext, fabricante de equipos eléctricos para la producción de energía, ha destacado que a la hora de elegir los proyectos que opten a los fondos europeos «es importante identificar sectores e industrias tractoras para que sean el eje de la transformación de la economía regional».

«En Andalucía hay sectores que ya son líderes» , entre ellos el cobre, por los que hay que apostar, según Quintana. El 1% del cobre que se consume del mundo se fabrica o se transforma en Andalucía, ha señalado. «Es muy complicado que Andalucía se convierta en un hub del automóvil europeo, no existe ese tejido, pero si tienes tejidos que ya son exitosos, refuérzalos y apóyalos», ha reclamado.

El presidente de Cunext ha señalado que el discurso que habría que hacer es ver «cómo doblamos lo que tenemos hoy», cómo conseguimos que «en el plazo de cinco años Andalucía tenga el doble de empresas de las que existen hoy y el doble de multinacionales».

A Ángel Haro , más que hablar de reconstrucción le gusta hablar de transformación de la economía, y de aprovechar la crisis para cambiar el modelo productivo hacia «un modelo más sostenible, más verde y más digital», que son las líneas que apoyan los fondos Next Generation.

El presidente de Prodiel ha apuntado que Andalucía «tendrá que hacer esfuerzos más intensos porque partimos con ciertas desventajas», como los más altos niveles de paro y una industria menos expansiva que en otros territorios de España.

El también presidente del Betis ha urgido a reformar la administración para que sea más ágil. A modo de ejemplo, como empresario del sector de energías renovables ha señalado que desde que se inicia la tramitación para conseguir la autorización de un punto de conexión hasta que se vuelca la energía a la red «se puede tardar hasta cinco años, cuando dos años ya son excesivos».

Haro ha recordado que hay inversiones muy importantes sobre la mesa. En este sentido, ha indicado que la empresa sevillana Prodiel tiene 3.500 megavatios en desarrollo en España, muchos en Andalucía, con un potencial de inversión de 2.700 millones de euros y 7.500 empleos, «que no pueden tardar cinco años».

En opinión del empresario, «la primera reforma estructural seria que tiene que abordar la administración es acortar los plazos de las tramitaciones administrativas». Haro ha enumerado las «palancas» que podrían impulsar la economía andaluza, como aumentar la productividad y la competitividad «reinventando nuevos productos y servicios», más internacionalización, innovación y digitalización o potenciar el talento también dentro de las empresas.