González Byass compra dos bodegas en Chile

Sin embargo, el resto de la sociedad se mantuvo en manos de la familia Rojas que, en sus orígenes, fue la

propietaria de Neyen y se había asociado al conocido bodeguero en 2012, aunque sus principales inversiones siempre han estado en otros sectores.

De esta forma, González Byass se hace con el control de las bodegas chilenas tras el acuerdo alcanzado con la familia Rojas, lo que le permite reforzar su apuesta en este mercado sudamericano.

Según ha detallado la bodega española, Viñedos Veramonte y Neyen Apalta Estate basan su filosofía en una viticultura orgánica , en el respeto y mimo de los viñedos, la flora y la fauna que les rodea, así como en el apoyo a las comunidades locales donde se asientan.

González Byass es una bodega familiar fundada en Jerez en el año 1835 y dedicada a la elaboración de vinos y bebidas espirituosas. Fino Tío Pepe, joyas enológicas como Noé o Apóstoles y el Brandy Solera Gran Reserva Lepanto, consagran esta firma como una de las principales bodegas del mundo.

La apuesta internacional de González Byass, que en el ejercicio 2020 representó el 73% de sus ventas, permitió en 2020 mitigar el impacto de la crisis de la pandemia en su facturación bruta, que descendió un 9,5%, y alcanzar un ebitda de 20,7 millones de euros..

«La rápida reacción del equipo directivo, el uso óptimo de la tecnología, así como la diversificación geográfica y de negocios de González Byass han permitido situar la facturación bruta de esta familia de vino y spirits en los 279,6 millones de euros», destacó la compañía.

La facturación neta de González Byass alcanzó el pasado ejercicio los 216,4 millones de euros, con un descenso similar. Al cierre del ejercicio 2020 (el ejercicio fiscal va del 1 de septiembre de 2019 al 31 de agosto de 2020), el ebitda de la compañía alcanzó los 20,7 millones de euros, frente a los 28,4 de 2019.