El rearme de Europa: último as de Airbus para relanzar el A400M

Fruto de este contexto, sus nuevas capacidades como el apagafuegos (un kit de extinción de incendios desmontable) y otras configuraciones para actuar en el caso de una guerra electrónica o la de nave nodriza (para lanzar drones y otras plataformas no tripuladas) están llamando la atención de algunos socios. Además, Francia se ha fijado en la versión de operaciones especiales, según han confirmado fuentes del mercado a ABC.

Esta muestra de interés llega después de que el gigante aeronáutico se pusiera serio con las naciones lanzadoras del programa hace unos meses. La compañía avisó de que el futuro del avión solo estaba asegurado hasta 2030 y les solicitaba mayor claridad con respecto a sus compromisos de compra.

Este avión, que se ensambla en Sevilla, fue concebido de forma colaborativa para contar una capacidad militar propia. España, Alemania, Reino Unido, Francia, Luxemburgo y Turquía fueron sus impulsores. En total, se comprometieron a adquirir 170 unidades, de las que aún quedan por entregar 48.

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Noelia Ruiz

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La falta de planificación y compromiso de los países llevó al CEO de Airbus, Guillaume Faury, a advertir que si alguno no cumplía con sus compras, el programa podría verse en riesgo antes de esa fecha. En concreto, lanzó un guiño a Francia, destacando que sus Fuerzas Aéreas estaban enamoradas de este avión.

Más allá de que se hayan intensificado las conversaciones con los países lanzadores, Airbus está desarrollando campañas comerciales en diversos puntos de la geografía.

Recientemente, el avión ha participado en la Feria Aeroespacial Mexicana (Famex), un evento organizado por las Fuerzas Armadas de este país latinoamericano. México está buscando renovar sus aviones de transporte militar y esta es una de las varias opciones que está estudiando.

Otra de las zonas en las que está tratando de vender el avión es Oriente Medio, tanto en Emiratos Árabes Unidos como en Arabia Saudí (país que aún cuenta por el momento con ningún avión de transporte estratégico).

Por otro lado, Reino Unido incluyó a esta aeronave en su Plan de Defensa hasta 2031. El gobierno inglés preveía hacerse con más aviones en los últimos años de la citada hoja de ruta, es decir, en torno a 2028. De concretarse, se sumarían a los 22 que ya encargó en sus inicios.

Por el momento, se han vendido 178 unidades del A400M, de las que se han entregado más de 120. Además de los países lanzadores, también lo han comprado Malasia, Indonesia y Kazajistán.

La buena noticia, más allá de la apuesta generalizada por elevar el gasto en defensa, es que el avión no cuenta con un competidor directo: Boeing dejó de fabricar el C-17 y Rusia, que ha presentado una nueva versión del Ilyushin Il-76, no se ve como un socio fiable al que confiarle una capacidad militar.

El año pasado, los países lanzadores del programa aprobaron una importante modificación de este avión que se caracteriza por poder volar a muy baja altitud de manera autónoma, incluso cuando la visibilidad es reducida. Además, tiene la capacidad de transportar y lanzar hasta 116 paracaidistas.

En los últimos años, el A400M ha realizado misiones con repercusión internacional. Cuando el terremoto de 2023 sacudió a Turquía y Siria, este avión se convirtió en un liado: no había carreteras y hasta siete naciones aportaron sus unidades a la flota turca de diez A400M para proporcionar ayuda humanitaria.

En 2018, el avión aterrizó en Indonesia cuando la pista estaba dañada por un tsunami y permitió entregar excavadoras para proporcionar auxilio a la población. También fue sonada la operación en la que evacuó a refugiados en Kabul.