Jorge Paradela: «En año y medio hemos captado 6.700 millones de inversión industrial»

-Usted es un consejero con un perfil muy técnico. Venía de la empresa privada, donde los procedimientos son más ágiles que en la Administración. ¿Cómo ha sido este año y medio al frente de la consejería? ¿Se ha desesperado en alguna ocasión con los 'tiempos' de la Administración?

-Bueno, es un momento de oportunidades para Andalucía y es bonito contribuir a esas oportunidades que se abren en la industria y la energía con el conocimiento que uno trae de la empresa privada. Cuando llegas al Gobierno regional directamente de la empresa privada tienes que acostumbrarte a determinadas cosas pero he tenido la suerte de crear un equipo muy bueno, con gente muy comprometida, que complementa mi falta de experiencia en el mundo de la Administración pública. Por otra parte, es cierto que te tienes que acostumbrar a que los procesos de la toma de decisiones son distintos y, sobre todo, su ejecución. Aún así, te das cuenta de la capacidad que tienes de influir y transformar cosas, por lo que la motivación es alta.

-¿De qué se siente más satisfecho en este período?

-Quizá de haber fijado unos objetivos y hoja de ruta para la consejería en breve plazo. En un mes y medio ya teníamos alineados lo que queríamos hacer y desarrollado una visión que integra las tres patas de la consejería: industria, energía y minas. Además, tenemos un ritmo de trabajo que incorpora muchos elementos de mi experiencia en la empresa privada. Por ejemplo, tenemos un comité de dirección semanal, e indicadores y cuadros de mandos que nos permiten hacer un seguimiento muy de cerca de cómo vamos en el cumplimiento de objetivos. Si hablamos de resultados, estamos captando inversión industrial a un ritmo muy alto y nos hemos convertido en una potencia en tramitación de energías renovables. Vamos a por todas en el aprovechamiento de la oportunidad que supone disponer de energía limpia a precios competitivos y eso se refiere también al hidrógeno verde y a otras fuentes energéticas. Es también muy interesante el momento que vive la minería metálica en relación con la transición energética, gracias a la riqueza que tiene Andalucía en cobre y otros minerales.

-¿Qué papel juega la estabilidad del Gobierno andaluz en la captación de inversiones industriales?

-Andalucía ofrece hoy día estabilidad política, institucional y presupuestaria. A eso hay que añadir que tenemos una fuerte dedicación al mundo de la empresa y tenemos un Gobierno fuertemente orientado a la simplificación administrativa.

-¿Cómo está funcionando la Unidad Aceleradora de Proyectos?

- Esa unidad tiene asignados 129 proyectos estratégicos que suman una inversión de 12.600 millones de euros y llevan aparejados la creación de 47.400 empleos, y es casi una extensión se nuestra consejería porque el 84% de los proyectos están relacionados con industria, energía o minas. El inversor agradece mucho la agilidad administrativa y la Unidad Aceleradora de Proyectos es una ventaja competitiva que tiene Andalucía. Otras comunidades están empezando a incorporar unidades aceleradoras de proyectos, como Madrid. La Comisión Europea nos ha pedido información sobre su funcionamiento. Se trata de un pequeño equipo de funcionarios de alto rendimiento, tienen experiencia en el sector público y privado, idiomas y una serie de competencias fundamentales.

-¿En cuanto se ha logrado reducir los tiempos de tramitación de los proyectos?

-Las reducciones que se están consiguiendo son notables, en algunos casos del 40 ó 50% de los plazos previstos. Como ejemplo le diré que en pocas semanas se pone en marcha la colocación de la primera piedra de una planta de biocombustibles en Huelva, liderada por Cepsa. El plazo de tramitación que la compañía estimaba para ese proyecto era de 18 meses y hemos sido capaces de sacarlo adelante en seis meses, lo que supone una reducción de dos terceras partes del tiempo previsto.

-Juanma Moreno quiere que la industria andaluza represente el 18% del PIB andaluz. ¿Es un hito difícil de alcanzar teniendo en cuenta nuestro punto de partida?La reducci

-La industria representa ahora el 13,5% del PIB andaluz, dos puntos más que hace cuatro años. Los objetivos de la Consejería en el campo de la industria es captar 20.000 millones de euros de inversión en esta legislatura. En un año y medio hemos logrado 6.700 millones. El otro objetivo es alcanzar una cifra de Valor Añadido Bruto Industrial de 22.500 millones de euros. Preferimos expresarlo así más que en términos de porcentaje de PIB.

-¿Cómo ayudarán los fondos europeos, tanto los Feder como los Next Generation (NG), a la industria andaluza?

-Los Feder nos permiten hacer muchas cosas. Por ejemplo, las órdenes de ayudas que van a ir vinculadas a cada Plan Crece Industria proceden del marco Feder. Respecto a los NG, la parte que más nos atañe tiene que ver con las ayudas de eficiencia energética, y Andalucía tiene la mayor más demanda de expedientes que ninguna comunidad autónoma. Están teniendo impacto pero podrían tener más si el modelo de tramitación fuera más amigable.

-Hay grandes retrasos en el pago de las ayudas para el autoconsumo energético de empresas y doméstico. ¿Qué van a hacer para resolver este problema?

-Por una parte, hemos hecho un plan de choque y hemos ampliado los equipos para tramitar esas ayudas. Pero lo más importante es simplificar el modelo y hay un gran consenso entre todas las autonomías, da igual el color político, sobre la dificultad extrema del modelo de tramitación elegido. No hay ninguna comunidad que vaya bien en la tramitación de esas ayudas por esa causa. Ahora estamos poniendo toda la carne en el asador para, con el Ministerio de Transición Energética, simplificar algunos aspectos de la tramitación.

-La industria aeronáutica ha despegado con la recuperación del tráfico aéreo tras el Covid. Sin embargo, hemos visto cómo Aernnova cerraba su planta de Sevilla con una plantilla de más de 100 personas.

-El sector aeronáutico andaluz creció un 17% en 2022 y estamos viviendo un impulso importante en la aviación comercial y militar, a tenor de los pedidos que se están haciendo a Airbus, tanto el A320 como del C295, lo que supone un incremento de la carga de trabajo de Sevilla y Cádiz. Lo de Aernnova es, por supuesto, una mala noticia. Es una decisión tomada por el capital hace tiempo pero va en dirección contraria a la tendencia del sector, que está en un momento de auge. Y ahora viene todo el impulso de la industria del espacio. Estamos dando pasos para que el sector aeroespacial andaluz forme parte del impulso del programa FCAS (Futuro avión de combate europeo). Queremos que la industria andaluza forme parte también de los programas de constelaciones satelitales.

-Andalucía acumula numerosos proyectos de hidrógeno verde. ¿Qué debe esperar Andalucía de esta industria?

-Según la Asociación Nacional de Hidrógeno, el 27% de los proyectos de hidrógeno que se anuncian en España están en Andalucía. Los más importante es que el hidrógeno nos ayuda a descarbonizar actividades como la industria pesada, el transporte marítimo, el transporte terrestre pesado y aporta soluciones para el transporte aéreo por la vía de los combustibles sintéticos sostenibles. ¿Por qué vienen a Andalucía esos proyectos? Fundamentalmente porque contamos con recursos renovables para alimentar la hidrólisis; por la ubicación geográfica, ya que somos puerta de África y puente con Latinoamérica; por los puertos, que jugarán un papel importante porque el hidrógeno puedes convertirlo en amoniaco y transportarlo fácilmente, y por la demanda industrial de de hidrógeno en el Campo de Gibraltar y en Huelva, donde se sustituirá el hidrógeno gris por hidrógeno verde. Todo ello con la ventaja competitiva que tendrá Andalucia en costes para producir hidrógeno que son las energías renovables.

-¿La clave para el despegue de esa industria está en la interconexión de hidrógeno verde entre España y Francia para dar salida a la producción andaluza de H2 en Huelva y Cádiz?

-Además de Cádiz y Huelva, se está desarrollando un 'hub' de hidrógeno en Almería. Las interconexiones serán importantes, tanto dentro de España, para transportarlo sur-norte, como con Europa. Hay una primera red troncal de hidroductos anunciada por Enagás, que cubre el corredor atlántico, pero donde no llega es a Algeciras. Para eso hemos puesto en marcha de la mano de Enagás un proceso de declaraciones de interés para demostrar con las empresas del sector que existe demanda de hidrógeno verde en Algeciras para justificar la construcción del ramal a Algeciras y adelantar al 2030 su construcción, ya que actualmente está previsto para el 2040, lo que nos parece inaceptable.

-Acaba de anunciarse además una planta de metanol verde en Huelva, de Cepsa, con mil millones de inversión, que ayudará a descarbonizar el transporte marítimo.

-Ese metanol verde es un combustible alternativo 'ganador' para el tráfico marítimo, está libre de emisiones, que sintetiza hidrógeno verde con CO2 biogénico, que procede de biomasa. Ahí es donde entra esa colaboración entre Maersk y Cepsa. Andalucía se puede convertir en una potencia de moléculas verdes.

-¿Con el hidrógeno y las fotovoltaicas, tiene Andalucía la gran oportunidad para dejar de depender del turismo y la agricultura?

-Prefiero hablar de sumar. Nosotros estamos prestando especial atención a 19 sectores, que son los que han recibido el Plan Crece Industria, reforzando los sectores naval, aeroespacial, piedra y mármol, frío industrial, mueble y madera, automoción, microelectrónica... Unido a eso, queremos que la industria pesada haga su transición. Hay que producir acero verde, cobre verde... y para eso vendrá bien el hidrógeno verde, que usa energía renovable y que nos ayudará a transformar la industria que ya tenemos y aspiramos a atraer nueva industria que no pueda electrificarse y que necesite esas moléculas verdes para hacer su transición.

-Las inversiones en fotovoltaica y eólica en Andalucía tienen un cuello de botella: la falta de redes de transporte. ¿Cómo pueden solucionar este problema?

-La región tiene 1.200 proyectos de energía renovable en tramitación con una potencia de 22.000 MW y una inversión asociada de 22.000 millones de euros. De los 1.200 proyectos en tramitación, 554 tienen autorización de construcción porque tienen punto de conexión a la red eléctrica. Nuestro objetivo es sumar 12.000 MW porque habrá proyectos que no obtendrán las autorizaciones o que decaerán. Por eso, necesitamos un desarrollo de la red de transporte eléctrico para ubicar nueva industria y atender necesidades actuales. Andalucía lleva todo el año pasado comunicándose con Red Eléctrica y el Ministerio de Transición Ecológica para explicarles cuáles son nuestras necesidades actuales, que empiezan a ser acuciantes, como en Andalucía oriental, más concretamente en Valle del Guadiato y los Pedroches, en Córdoba, pero también en la provincia de Jaén en su totalidad. Necesitamos más potencia en la Faja Pirítica de Huelva; cerrar el anillo de Sevilla de 400 kilovoltios de alta tensión para complementar implantación de nuevas industrias; una nueva posición en la Llerena para empezar a construir alta tensión hacia Granada y Jaén, etcétera.

-Pero el Gobierno sólo va destinar a Andalucía el 2% (6 millones de euros) de las últimas inversiones incorporadas (321 millones de euros) al plan de Desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica 2021-2026.

-Andalucía parte de una situación de desventaja porque tiene un 42% menos que la media peninsular en kilómetros de red eléctrica por cada millón de habitantes. La región tiene más potencial que otras autonomías, parte de una situación de desventaja, lleva un año documentando nuestras necesidades y ahora sólo nos dan 6 millones de los 321 millones. Hemos presentado ya nuestras alegaciones y ahora el Gobierno dice que abrirá un nuevo ciclo de planificación en 2024 pero Andalucía necesita más inversiones.