Fujitsu centraliza en Sevilla los servicios de ciberseguridad del grupo
La sede andaluza se coloca como la segunda de la compañía en España por delante de Barcelona y Valencia por volumen de negocio y actividad
Boom de consultoras tecnológicas en Sevilla, con récord de contrataciones
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Iniciar sesiónLa multinacional Fujitsu está a punto de cumplir cincuenta años de trayectoria en Sevilla con unos números de envergadura. Desde la pandemia, el equipo ha pasado de 400 a más de 600 profesionales distribuidos en nuevas divisiones. También ha multiplicado los servicios que ofrece ... como la inteligencia artificial generativa y la ciberseguridad, una de las áreas que ha focalizado en la ciudad desde donde atiende a clientes de todo el mundo.
La sede andaluza es la segunda en importancia para la compañía en España, donde tiene además presencia en Madrid, Barcelona y Valencia. Lo explica Elena Delgado Senín, responsable de servicios de dirección de infraestructuras de datacenter, puesto de usuario y servicios en la nube en la oficina hispalense, que se amplió y se renovó por completo en 2019. «Ahora no necesitamos tanto espacio como antes, porque hemos incorporado el teletrabajo y los servicios son más globales», asegura.
No obstante, el número de empleados ha crecido en la Factoría de Sotware, el Centro de Gestión Remoto de Infraestructura, Data Center y Multicloud y en el Servicio de Operaciones de Seguridad de España, que se encuentra alojado en estas dependencias. A ellos se suman los equipos de Análisis de Datos e Inteligencia Artificial y los de Supercomputación.
Uno de los cambios más importantes que se han experimentado es el considerable aumento de clientes extranjeros que se atienden desde Sevilla, principalmente de Francia y Bélgica. Lo hacen a través del Near Response Centers (NRC), que ofrece servicios de TI híbrida (infraestructura interna propia combinada con la infraestructura basada en la nube), de multinube, empresariales y de aplicaciones, incluyendo la ciberseguridad. Fujitsu sólo dispone de dos centros de este tipo en Europa y uno de ellos está en en la ciudad, el otro se encuentra en Tallin (Estonia).
El Servicio de Operaciones de Ciberseguridad de la multinacional japonesa lleva establecido en Sevilla desde 2014, pero ha sido en estos últimos dos años cuando más se ha reforzado con la incorporación de nuevos profesionales y la prestación de servicios en el resto de Europa. Delgado asegura que «es uno de los departamentos que más ha crecido con más de veinte ingenieros seniors dedicados a esta labor».
«Actualmente son una referencia a nivel nacional y tienen la doble componente, pues trabajan para clientes privados y para el sector público», indica. Uno de esos clientes en el Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe), la entidad española encargada de promover la seguridad y la confianza digital. Esta división se ha expandido hasta Málaga, donde está el mayor hub de ciberseguridad del país, y allí dispone de un espacio en el Centro Andaluz de Ciberseguridad donde desarrolla soluciones y productos para el ámbito sanitario.
El principal cliente del centro sevillano de Fujitsu es el Servicio Andaluz de Salud, un enorme mastodonte que precisa de una atención permanente. «Fujitsu no es responsable de aplicaciones como Diraya, pero sí de la gestión de la infraestructura», comenta Delgado. Desde las oficinas de Nervión se gestionan los sistemas e instalaciones de centros de salud, hospitales y laboratorios de toda la región.
«Ese ha sido nuestro gran proyecto y llevamos en esta tarea desde 2004. Más de veinte años en los que hemos logrado renovar en cada licitación», comenta, porque en el sector público no basta con fidelizar al cliente, «hay que competir en cada concurso». La misión del proyecto es la administración global de todos los sistemas, desde los data center a los servicios centrales de la sanidad andaluza. «El sector público tiene un peso importante, pero también estamos en otros ámbitos como la banca, el retail y las empresas», dice esta portavoz de la multinacional.
El principal problema con el que se encuentra esta delegación de la compañía nipona es la falta de profesionales cualificados. La directiva admite que «los buscamos directamente en las universidades, de hecho tenemos un programa de becas que ofrece un contrato y un plan de carrera para captar talento». «Hay una competencia feroz entre las empresas por los ténicos e ingenieros», reconoce.
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