¿Es posible la mujer perfecta?: Belleza y narcisismo

El fenómeno de las redes sociales ha potenciado el culto a la imagen . La publicidad, a través de nuevas y antiguas vías, nos acosa constantemente para que parezcamos más jóvenes y bellas . Los medios de comunicación bombardean incesantemente con todo tipo de productos con los que supuestamente no perderemos la ansiada (e irrecuperable) juventud. Se nos ofrece la idea de que la mujer perfecta es posible y factible. La fémina del siglo XXI puede ser guapa, esbelta, elegante, exitosa en su trabajo y buena madre , todo al mismo tiempo. En realidad, es muy difícil reunir todos estos dones en una sola persona, por lo que en ocasiones se crea un sentimiento generalizado de frustración. Para aunar tantas virtudes y facultades es preciso un gran esfuerzo y disciplina, aparte de poseer ciertos dones regalados por la naturaleza.

Sería una frivolidad pensar que la belleza es un asunto banal. El género humano se siente atraído por lo bello en sus más diversas facetas. La noción de atractivo físico no ha permanecido inmutable a lo largo de los tiempos, sino que cada época y cultura han tenido sus preferencias. En palabras de la ilustrada Josefa Amar y Borbón: «La inclinación en las mujeres a adornarse y componerse ha sido de todos los tiempos, de todos los países y de todas las clases. Se adornan las que viven en las cortes, en las ciudades y hasta en las aldeas.» La Historia del Arte es elocuente en este sentido. Hace siglos este ansiado don era desplegado por mujeres rubias, de piel inmaculada, ojos claros y rasgos delicados . La pintura italiana nos muestra el citado canon a través de escenas mitológicas en las que Venus es personificada por jóvenes de piel blanca y espléndidas cabelleras rubias.

La manera de enfocar la vida y las relaciones con el propio cuerpo han sufrido modificaciones cruciales en muy corto espacio de tiempo. Es necesario reivindicar la belleza a todas las edades ya que no solo es un atributo de la juventud, sino que existen muy diversos tipos y muy distintas maneras de apreciarla y valorarla. Los espectaculares adelantos en el campo de la cirugía estética han provocado, en ocasiones, una huida hacia delante con resultados desafortunados. Vemos a actrices con el rostro excesivamente tirante, labios voluminosos y un busto extrañamente protuberante, por no hablar de narices fabricadas en serie.

Probablemente Oscar Wilde no habría podido imaginar que su novela 'El retrato de Dorian Grey', publicada en 1891, estuviera de plena actualidad. El joven Dorian representa el arquetipo del narcisismo; se adora a sí mismo, es guapo, rico y elegante . La vanidad le lleva a vender el alma para que su belleza y juventud permanezcan inmutables, pero su espíritu se corrompe irremisiblemente. Mientras los demás envejecen, Dorian permanece incólume al paso de los años. En su breve relato el escritor desgrana los peligros que acechan a las personas vanidosas y egocéntricas . La belleza es un conjunto de dones que abarcan lo físico pero no exclusivamente. Es un concepto mucho más complejo y profundo. En palabras del propio Wilde: «La belleza es superior al genio, no necesita explicación.»

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