Danae y Dionisios usan la danza para pedir equilibrio entre el hombre y la Naturaleza

La compañía clausura así las citas en el claustro de los muertos del Monasterio San Isidoro del Campo en esta edición del festival de Itálica 2019.

Estos bailarines griegos se han formado en la Escuela Nacional de Danza de su país, y ambos confiesan que en Grecia, «la danza contemporánea sobrevive, estamos luchando. Pero la gente intenta encontrar a esta situación un lado positivo, y si no hay condiciones, las inventa. Hay que darle luz a la oscuridad», aseguran. Antes de inciciar hace tres años su colaboración, ambos bailaron en la Hellenic Dance Company.

«Atma» es la obra que presentan en Sevilla, una pieza en la que creen que pueden mostrar su trabajo, tanto corporal como de investigación. «Cuando empezamos a crear juntos nos planteamos qué queríamos hacer. Éramos muy sensibles a los temas medioambientales, a cuestiones como la desaparición de bosques, de mares, de la extinción de algunas especies animales, y cómo todo esto afecta al ser humano. Esto nos preocupa y queremos compartir este proceso con los demás a través de la danza. Con nuestra obra no queremos acusar a nadie, sino presentar un espacio en que la gente disfrute de la belleza pero que sin olvidar la parte oscura que rodea al medio ambiente», explica Dionysios.

«Atma» que en sánscrito significa aliento, esencia o alma, está inspirada en la imagen del leopardo de las nieves o del Hymalaya, «un animal que parece vivir en un entorno idílico, pero que no es así, ahí también se producen cosas».

Preocupados por la situación actual de divorcio entre el hombre y la Naturaleza, «queremos encontrar ese término medio donde podemos vivir ambos. Pero no, no es cuestión de activismo. Para nosotros el mensaje es lo más importante, es lo que queremos transmitir».

La compañía Danae & Dionysios protagoniza también uno de los espectáculos de calle de la programación del festival, en concreto la obra, «Uncia», primera creación de estos artistas emergentes griegos.