Flamenco
Patricia Guerrero: «El Ballet de Andalucía debería ser la insignia del flamenco»
La compañía institucional vuelve a la escena en el Generalife de la Alhambra con una obra de su nueva directora y la dramaturgia de Alberto Conejero
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El personaje de Mariana Pineda y la obra escrita por Federico García Lorca ha sido el elegido por la bailaora y coreógrafa Patricia Guerrero (Granada, 1990) como su presentación al frente del Ballet Flamenco de Andalucía. El estreno será el día ... 3 de agosto en el Generalife de la Alhambra dentro del tradicional Festival Lorca y Granada, que se celebra en este espacio desde el año 2002.
Los aciagos e inciertos últimos tiempos del Ballet, con incluso peligro de desaparición, aparcan estos nubarrones tras la elección de su nueva directora, que está emocionada por este estreno. No en vano Guerrero, Premio Nacional de Danza 2021, vuelve a su tierra. «Estrenar una obra de Lorca que nunca había hecho, y en mi tierra. Se juntan ahí muchos sentimientos y encima interpretando a una heroína de Granada. Para mí es como jugar en casa. Me pasa como en Sevilla, pero en Granada aún más porque viene toda mi familia, y toda la gente que me ha visto crecer y ha visto mi carrera desde muy pequeña. Me emociona», comenta la bailaora.
En este viaje iniciático al frente de la compañía institucional no está sola, ya que está bien acompañada por el dramaturgo jienense Alberto Conejero, el coreógrafo y bailaor Alfonso Losa y el también bailaor y repetidor de la compañía, el almeriense Eduardo Leal.
Dice Patricia Guerrero que se siente feliz y satisfecha. «Creo que hemos hecho un buen trabajo y estos meses hemos trabajado muy bien con buen ritmo, muy ordenadamente con muy buena predisposición por parte de todos, tanto del elenco como de los creadores. Estamos bastante seguros de lo que hemos hecho, aunque tengamos los nervios del estreno. A veces se llega más justo, pero no en esta ocasión, porque facilita mucho el trabajo tener tiempo para la creación y tener una sede, poder probar y rectificar sabiendo lo que funciona y lo que no. Esto es primordial y ha definido el espectáculo. A nivel de trabajo estoy supercontenta y a nivel emocional, muy nerviosa», asegura.
La obra estará llena de sorpresas que no quiere desvelar. «Desde los primeros cuatro minutos que hay una sorpresa maravillosa que la gente no se espera». Subraya igualmente que el trabajo con Alberto Conejero ha sido muy fluido. «Las reuniones y charlas sobre Mariana y mi punto de vista de cómo veía al personaje coincidían con él, además de lo que yo queria realzar del personaje. Nunca habíamos trabajado juntos. El guión que ha escrito es una belleza, lo lees y te evoca las escenas y los detalles. Es pura inspiración que me ha servido mucho como punto de partida para la coreografía y la dirección de escena. Me ha dado los colores y los matices. Ha sido sorprendente lo bien que nos ha ido».
Dice también que la intención de trabajar con el dramaturgo partió de ella «porque era una obra que ya existía y tenía que haber una readaptación. Era primordial escribir una obra más dancística. El riesgo de la dirección sí es absolutamente mío, aunque he tenido mucha ayuda tanto de Eduardo Leal como de la Venidera con su aportación a la coreografía de la 'Batalla del Albaicín', que le ha dado un giro de estilo al espectáculo que lo sube muchísimo». Además, añade que «la aportación coreográfica de Alfonso Losa le ha dado mucha potencia. Ahí hay una coctelera muy buena, con estilos que se coordinan y funciona. Y ha salido muy bien. Cada parte y cada personaje tienen su carácter y su esencia. Era muy importante reescribir por eso la obra».
De bailarina a directora
Patricia Guerrero bailó en el elenco de Ballet Flamenco de Andalucía bajo la entonces dirección del sevillano Rubén Olmo, hoy al frente del Ballet Nacional de España. Ahora, como directora de una compañía institucional, es consciente de que los tiempos son diferentes. «Es la administración pública y los tiempos son distintos. Yo tenía experiencia en la dirección con mi compañía. Mi obra 'Deliranza' ya tenía un gran formato y encima de profesionales, no gente joven, sino con un poso y una carrera. Pero a lo único que para sí he tenido que adaptarme es a los tiempos. Cuando pides algo, tarda mucho más o lo tienes que pedir varias veces, cuando en mi compañía privada decides algo y lo haces. Es lo único diferente: los tiempos. Pero para una creadora es un regalo tener el espacio y los meses suficientes para montar y los bailarines con sus sueldos todos los meses», asegura.
El elenco de la compañía ha respondido incluso por encima de lo que pensaba. «Han crecido desde febrero a hoy. Ha habido una evolución emocionante en ellos, es muy fuerte. Entraron con muchas ganas y han madurado, incluso sus cuerpos se han transformado, porque tenemos diariamente clases de ballet y eso te hace estar al día físicamente. Mentalmente te vuelves rápido en memoria coreográfica. Es más, cuando la gente vea el sábado al Ballet Flamenco de Andalucía, va a ver un ballet muy fuerte y con mucha personalidad».
Por otra parte, esta bailaora y coreógrafa cree que esta obra va a tener largo recorrido. De hecho, tras el Generalife estarán en el festival Flamenco on fire de Pamplona y luego en el Teatro de la Maestranza dentro de la programación de la Bienal de Flamenco. «Yo creo que esta obra va a tener mucho recorrido. Es muy actual, es muy flamenca, muy europea y se debería llevar a todo el mundo, porque es una buena representación de nuestro arte y habla de muchas cosas de nuestra cultura». En cuanto a calidad musical, escénica y coreográfica -prosigue- está a muy alto nivel. El público se va a emocionar desde el primer minuto con esta 'Mariana', es muy honesta y hemos querido sacar del personaje lo más humano, que es el proceso hacia la muerte que he intentado hacer de una forma muy poética, y eso era un reto. Hay muchos sonidos lorquianos y nos reconocemos en ellos».
También reconoce que le gustaría quedarse con los cuatro bailarines que han sido contratados como aumento para el Generalife. «Para mí sería la perfección este número de bailarines, con menos me parece muy pequeño. Este es el número ideal, es decir, catorce personas, más Alfonso Losa y yo en escena. En total dieciséis. Sin el aumento seríamos nueve más Eduardo Leal y yo. Once personas. Muy pocos».
También quiere que el ballet tenga una fuerte presencia y que recupere el sitio que merece, «porque lleva ya treinta años de existencia y por aquí han pasado grandes maestros y además los bailarines del elenco han sido siempre el futuro del baile y hoy son figuras del flamenco. El Ballet de Andalucía debería ser la insignia del flamenco. Las compañías privadas, por supuesto, yo vengo de ahí, pero sí apoyarnos y mirarnos en un ballet que tenga una calidad y que se cuide. Primero hay que empezar a cuidar lo público y es importante apoyar las compañías institucionales, porque es un ejemplo para las compañías privadas, y lo digo como artista. Al final todos venimos de ahí».
«Le pido a Patricia del Pozo que apoye al Ballet Flamenco de Andalucía con mucho interés, le guste o no el flamenco, porque es que nos pertenece a todos y se deben sentir orgullosos de tenerlo»
Patricia Guerrero
Directora del Ballet Flamenco de Andalucía
La Consejería de Cultura ha vuelto a recuperar la independencia y recupera también a una consejera, Patricia del Pozo, que en su anterior etapa al frente de este departamento siempre ha apoyado el flamenco. A ese respecto, afirma Patricia Guerrero que «yo estoy aquí, en mi puesto, y le pido que apoye al Ballet con mucho interés, le guste o no el flamenco, porque es que nos pertenece a todos y se deben sentir orgullosos de tenerlo».
Pero su cabeza ya está dando vueltas a una nueva creación. «Ya tenemos fecha de estreno del siguiente espectáculo, que será en el Teatro del Maestranza el próximo año el 18 de mayo. Haremos una colaboración con la Academia del Piaccere, un encuentro con el barroco que tienen que ver mucho con nuestra historia. Entre el flamenco y el barroco hay una relación muy da raíz, y yo he trabajado ya varias veces como Fahmi Alqai y este proyecto surgió y hablamos y será muy bello. Se llama 'La semilla de los tiempos. Rapsodia en siete actos' y nos pondremos a ello. Mientras tanto, mi idea es ir creando 'Tierra bendita', que es la suite flamenca de la que ya tengo elaboradas algunas piezas y tener ese formato más flamenco que nos va a venir muy bien para presentarnos en sitios más pequeños. Esto es un no parar».
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