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«La isla mínima» de Alberto Rodríguez llegará en septiembre
El director sevillano presentó en el Festival de Málaga un avance de su última película, un «thriller» rodado en las Marismas
«La isla mínima» de Alberto Rodríguez llegará en septiembre
Tras el éxito de «Grupo 7», ambientada en la Sevilla previa a la Exposición Universal de Sevilla de 1992, mucho se espera de «La isla mínima», el nuevo trabajo del director sevillano Alberto Rodríguez, que llegará a los cines en septiembre y de la ... que ayer se pudo ver un avance en el Festival de Cine de Málaga.
Protagonizada por Raúl Arévalo, Javier Gutiérrez, Antonio de la Torre y Nerea Barros, se trata de un thriller que se desarrolla en la España de los ochenta y que cuenta la historia de dos policías (Arévalo y Gutiérrez), que son expedientados y, como castigo, enviados a buscar a dos niñas desaparecidas en un pueblo de las marismas del Guadalquivir. Un «thriller» que recorre esa zona y los pueblos «fantasma» en que se convirtieron hace varias décadas.
Rodríguez participó en la sección «5 minutos de cine» del Festival de Málaga y explicó que le interesó mucho la historia de las marismas, donde en los años treinta se puso en marcha el cultivo del arroz por la zona tradicional de producción, Valencia, estaba en zona republicana.
En los años setenta y ochenta, esos cultivos se desmantelaron «porque no tenía sentido que la gente viviera allí en condiciones durísimas, y quedaron los pueblos fantasma», precisó el director.
Una historia que poco tiene que ver con su trabajo anterior, «Grupo 7», que cosechó un gran éxito de público en España y recibió 16 de nominaciones a los premios Goya , logrando dos «cabezones», los de mejor actor de reparto (Julián Villagrán) y mejor actor revelación (Joaquín Núñez).
Alberto Rodríguez apuntó que «lo más coincidente es que la película es de época y hay dos policías, pero ahí acaban las similitudes».
«’Grupo 7’ era el ascenso y caída de una banda de gángsters, aunque tenían placa, y esta película es más sobre quién lo hizo, buscar y perseguir al criminal», añadió Rodríguez, que también quiso mostrar «de fondo» el papel de la mujer en ese momento en la España rural, «que era poco menos que cero».
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