Vox amaga en el Pleno con romper con José Luis Sanz en medio de la negociación del presupuesto para 2026

La portavoz de Vox en el Ayuntamiento avisaba ya de esta 'nueva' postura de su grupo en el turno de intervenciones del debate sobre las ordenanzas fiscales. Cristina Peláez dijo que el proyecto elaborado por el gobierno de José Luis Sanz era «poco ambicioso y liviano» y que la mayoría de cambios en las tasas, impuestos y precios públicos «nos parecen un mero trámite». La 'amenaza' política se tradujo en un voto negativo en algunos puntos de la iniciativa de la Delegación de Hacienda, a pesar de que los ediles del partido de Abascal fueron los únicos que no presentaron enmiendas al proyecto. Una postura negacionista que días atrás ya dejaron entrever en el caso de la subida de la tasa de basuras a la que obliga la Ley 7/2022 sobre la gestión de residuos y el reciclaje y que el ejecutivo municipal se vio obligado a retirar del orden del día del Pleno por la falta de apoyos.

Lo ocurrido en el Salón Colón ha sido una pequeña advertencia por parte de Vox al gobierno municipal que justo coincide en el tiempo con el inicio de la negociación de los presupuestos municipales de 2026, que todo indica que saldrán adelante repitiendo el pacto entre el alcalde y los de Abascal que ya se escenificó en 2025. Y fue sólo un aviso, porque a partir de ahí volvieron a su senda habitual en el Pleno, apoyando prácticamente todas las iniciativas del gobierno municipal que se incluían en el orden del día. El voto a favor de los concejales de Vox fue clave para desbloquear el proyecto de cambio de usos de los suelos que permitirá construir el nuevo barrio del Puerto, donde se edificarán 700 viviendas en la avenida de las Razas. También aprobaron la moción del PP para reclamar al Gobierno de España una ampliación del aeropuerto de San Pablo y hasta la pregunta al alcalde, en este caso sobre los nuevos vuelos turísticos en helicóptero habilitados en la Cartuja, fue planteada por Peláez en un tono más que conciliador.

Pero más allá de este juego político entre ambas formaciones, a los ediles de Vox no les hizo ninguna gracia uno de los primeros puntos que se votaron en el Pleno. Su oposición a la Memoria Democrática les hizo rechazar la rotulación de una calle en Pino Montano con el nombre de 'Las Trece Rosas', dedicada a un grupo de mujeres que fueron asesinadas durante el régimen franquista. El partido de Abascal votó en contra y ni siquiera las mencionó en un discurso en el que sí habló del resto de nominaciones. El PP, por su parte, decidió abstenerse, provocando las críticas de la izquierda. Tanto el PSOE como Con Podemos-IU acusaron al gobierno de plegarse al interés de Vox, pero con esa postura de 'perfil' no contentaron a ninguno de los grupos de la oposición. A partir de ahí, Peláez y sus concejales decidieron rechazar parte de las ordenanzas fiscales, pero el enfado se quedó ahí. A ellos, como al propio ejecutivo, les interesa que nada interfiera en una negociación del presupuesto que debe resolverse pronto. Al menos, esa es la intención.