Gervasio Iglesias: «Cuesta mucho contratar a un técnico de cine en Sevilla. Están muy cotizados y no hay paro en el sector»

-Estudió Filosofía en su juventud. ¿Le ha servido de mucho?

-La verdad es que muchísimo. Me ha ayudado mucho y me ha dado una visión poliédrica de la vida, lo cual es muy bueno a la hora de contar historias. Tener muchos puntos de vista. Y el cine es una de las pocas artes humanistas que quedan: trata la estética, la plástica, pero también los hechos y los sentimientos de las personas. Y todo esto tiene mucho que ver con la filosofía.

-¿Recomendaría estudiar Filosofía a cualquier joven que quisiera trabajar en el mundo del cine?

-Por supuesto. Es una de esas carreras fundamentales que hay en la universidad, a pesar de que cada vez se estudie menos. Hay una especie de moda con las carreras técnicas, que está muy bien, pero me parece que debemos tener una base de lo que somos como humanos. A mí me da esperanza que uno de los libros más vendidos de los últimos años haya sido Sapiens, de Yuval Noah Harari, que es un ensayo sobre lo que somos.

-¿Siempre tuvo claro que se dedicaría al cine?

-Desde muy joven. Con 12 años ya estaba haciendo cortometrajes y con 16 ó 17 años estuve trabajando en un cine club y, poco después, con 17 ó 18 Juan Bollaín me contrató para una serie que estaba haciendo para Canal Sur.

-¿Qué pasaría con el cine sin subvenciones?

-Principalmente que la gente que está empezando no podría hacer películas. No dejarían de hacerse en el resto de los casos pero las películas serían seguramente peores porque tendrían menos tiempo de rodaje y de postproducción. Una subvención puede suponer una semana más de rodaje y dos de postproducción y esto supone más calidad.

-¿Sevilla es una ciudad especial para el cine y los rodajes?

-Es ideal porque tiene una parte monumental espectacular y otra parte urbana y contemporánea que también es muy buoena para los rodajes. Además, Sevilla tiene buen tiempo y muchas horas de luz. Es raro que llueva, un problema para los rodajes. Conocí a varios guionistas de 'Juego de Tronos' que me dijeron que Sevilla era ideal por todo esto y porque luego podías salir a cenar casi a cualquier hora y nadie te agobiaba. En otras ciudades sales del rodaje y solo tienes abierto el hotel. Ahora mismo no hay paro en Sevilla en este sector. Todo el mundo está trabajando y cuesta contratar a alguien para un rodaje a corto plazo porque hay muchos proyectos.

-¿Cuál es su película española favorita?

-Hay varias. Me marcó mucho 'Arrebato'. También me parece impactante 'El verdugo'. Y también 'Carmina o revienta', por su poética underground. Creo que hay que formar nuevos públicos. Tengo amigos cineastas que le ponen a sus hijos de 9, 10 ó 12 años les ponen películas clásicas y se quedan enganchados. Porque son muy buenas historias. Hay que darle acceso a esas películas a los jóvenes, no sólo de superhéroes.

-¿Se debería dar en los colegios alguna asignatura sobre historia del cine?

-Sí. Y me parece alucinante que no se dé. El cine es el arte más joven pero ya tiene un gran acervo cultural en estos 120 años. Se da historia de la literatura, o la música, pero no del cine. Y lo audiovisual es lo más predominante en la gente joven. ¿Cómo no se dan cuatro o cinco películas cada año en los colegios e institutos? Películas como 'Tiburón' son de acción pero dicen mucho de la sociedad americana de su época. ¿A qué chaval no le gustaría 'West Side History'?

-Está terminando ya su segunda novela. ¿Puede adelantar algo?

-Es sobre la vida de Ángela de la Cruz. Siempre me interesó su vida porque viví en el barrio de las hermanitas de la Cruz toda mi infancia y las veía casi a diario. Encontré un artículo en ABC sobre ella que me impactó y empecé a tirar del hilo. Es un historión por muchos motivos. Su relación con la infanta María Luisa al final del XIX es interesantísima. Y lo digo yo que no creo en Dios pero sí creo en Ángela. La idea es presentar el libro en la Feria del Libro de Sevilla de este año. Me reuní con la madre superiora, Mercedes, porque pensé inicialmente en una serie. Hablamos dos veces pero me dijo que no veía la serie porque no visualizaba a ninguna actriz para interpretarla. Lo respeté, por supuesto.