Las dos velocidades del metro: 0 kilómetros construidos en Sevilla y más de 50 en otros suburbanos de España

La llegada de la crisis financiera de 2008 supuso que la ampliación de la red de metro se frenara en seco durante años y los proyectos se quedaron guardados en los cajones. Mientras tanto, en otras latitudes del país, se han realizado actuaciones y se han adjudicado también futuros proyectos para los próximos años. Uno de los metros donde ha habido más novedades en esta última década y media es el de Madrid, sobre todo, por las futuras conexiones. Por ejemplo, las obras para la prolongación de la línea 3 desde la cabecera sur hasta la conexión con la número 12, los Cercanías de Renfe y Getafe comenzaron en enero de este año.

También, hay previsto un proyecto de prolongación de la línea 5 para conectar el extremo norte del trazado con las tres primeras terminales del aeropuerto. En 2025, se prevé que esté realizada la obra. Además, otra parte de la red que se está ejecutando es la línea 11, desde la plaza Elíptica hasta la estación de Conde de Casal, donde se construirá un intercambiador, coincidiendo las líneas 1 y 3 en Atocha y Palos de la Frontera respectivamente y con otra estación en Madrid Río. Con respecto al Metro de Sevilla, el primer intercambiador de transportes que se conocería sería cuando llegue la línea 3 al Prado de San Sebastián y se una con la 1, la cual viene desde Olivar de Quintos o Ciudad Expo.

En la zona de Viapol y San Bernardo, hay numerosas paradas de autobuses, Cercanías y Metro pero no se trata de una estación de intercambiador como las que existen en la capital de España con numerosas salidas hacia otras líneas. Una de las más grandes que existen en Madrid es la que hay en la avenida de América, en una de las salidas de la urbe hacia la ronda de circunvalación de la M-30 y hacia la autovía que se dirige hasta los núcleos del noreste, así como a Zaragoza y Barcelona.

En la Ciudad Condal, se puso en funcionamiento en 2016 la conexión entre el aeropuerto y la zona universitaria con una longitud de casi 20 kilómetros y 15 estaciones. Todo ello, orientado para tener unas mejores conexiones en eventos como Mobile World Congress. Sin embargo, en Sevilla, no hay posibilidades de ir en el suburbano al Palacio de Exposiciones y Congresos hasta que se construya la línea 2. Barcelona tiene en la actualidad 193 estaciones, incluyendo las que se hallan en el Funicular de Montjuic. Estas paradas se reparten por todo el área metropolitana de la capital y atraviesan numerosos puntos con más de 170 kilómetros construidos.

Otras capitales como Valencia han inaugurado recientemente otra línea de metro, la número 10, que tiene ocho estaciones. Con respecto al trazado de la 9, funciona desde 2015 y, tres años después, contaba con hasta 23 estaciones. Por otro lado, en Bilbao, hace un lustro, se puso en marcha la línea 3, con paradas en lugares como el Casco Viejo o Uribarri. Asimismo, se ha actuado sobre diversas estaciones y se ha cerrado el proyecto definitivo de la segunda línea.

En Alicante, se combina el tranvía, el metro ligero y los cercanías pero, se han hecho actualizaciones de la red con hasta seis líneas que alcanzan Denia, Altea o Benidorm. Asimismo, en Málaga, se han desarrollado dos líneas que se unen en la estación de trenes de María Zambrano y ya se han realizado las obras necesarias para llevar el metro hasta el centro de la capital de la Costa del Sol. Estos son sólo algunos ejemplos de los avances que se han producido en otras capitales del país desde que comenzó a funcionar la primera línea del suburbanos hispalense. Hasta el momento, las obras siguen paradas, no han comenzado los trabajos del ramal técnico de la línea 3 y las demás no se han actualizado.