«Vamos a endurecer las sanciones por ensuciar las calles, no puede seguir saliendo gratis»

– ¿Tan difícil es tener la ciudad más limpia? ¿O se trata sólo de una percepción ciudadana, como tanto suele decirse desde el poder?

– Desde mi primer minuto como alcalde reconocí que Sevilla podía estar más limpia y le aseguro que es un tema que me preocupa y al que le dedico mucho tiempo. Lipasam tiene una gran plantilla a la que defiendo por encima de las críticas, pero es una plantilla insuficiente. La ciudad ha crecido y eso hace que el número de operarios sea insuficiente para atender la limpieza como debiera ser. Al hilo de esto, la gente tiene que conocer las restricciones que tenemos las administraciones públicas para aumentar esas plantillas. Dicho esto, tengo que subrayar que desde el 1 de septiembre hemos incorporado 125 personas que se van a repartir en todos los distritos. Y eso se tiene que notar sí o sí en una mejora de la limpieza, sobre todo en los turnos de tarde. Han entrado hace apenas semana y media, pido quince o veinte días para que se empiece a notar la efectividad de este refuerzo.

– Como punto de partida está bien, pero harán falta más cosas, ¿no?

– Además, estamos renovando con una inversión de más de dos millones de euros los contenedores, porque muchos de ellos son focos de malos olores por no cumplir su cometido dado su deterioro. Especialmente por una circunstancia que tiene Sevilla, que es el calor. Una señora me paraba el otro día en la calle Trajano diciéndome que venía de Oviedo y que estaba mucho más limpia que Sevilla. Pero claro, aparte de que los servicios pudieran funcionar mejor hay una clara diferencia, y es que allí llueve trescientos días al año y aquí apenas lo hace. No estoy quitándome responsabilidades ni echándole la culpa a que llueve poco. Pero todo es al final la suma de muchas causas.

– La fundamental no será a estas alturas la lluvia...

– La fundamental es que tenemos una plantilla insuficiente que hay que ir ampliando, tenemos que renovar maquinaria y contenedores, y tenemos también que recuperar los sistemas de riego y de baldeo, porque lo han pedido los ciudadanos. Y no quiero culpar de la situación a la gente, pero en último lugar habrá que apuntar también que en algunos casos se echa en falta una mayor contribución a la limpieza por parte de los ciudadanos y de algunos sectores económicos que ocupan el espacio público. No me escondo en este tema. Tengo contacto con otros alcaldes y en Barcelona, Madrid o Málaga el problema es similar. No quiero exculparme, que quede claro, pero la mayoría de las grandes ciudades tenemos un gran quebradero de cabeza con la limpieza.

– Será que también hay una cuestión de fondo relacionada con el incivismo o la falta de educación que los ayuntamientos no afrontan porque es políticamente incorrecto...

– Yo digo que los ciudadanos podemos contribuir de una manera más efectiva a que la ciudad esté más limpia. No quiero escurrir el bulto y no asumir mi parte, pero los ciudadanos podemos ayudar más de lo que lo hacemos. Di una vez una conferencia en una facultad y preguntamos por la botellona. Casi todos los chavales presentes la hacían y prácticamente todos admitían que no recogían luego las bolsas, las cajas de pizza, las botellas o desperdicios porque, sencillamente, luego venía Lipasam y lo limpiaba. Ese es el escenario que tenemos.

– ¿Y si en vez de Lipasam mandan ustedes a al Policía Local durante la botellona, que por cierto está prohibida?

– Hay que actuar más en esa dirección, sí, es así. De hecho, le anuncio que vamos a endurecer las sanciones en el ámbito de la limpieza. Es una falta y no puede seguir saliendo gratis dejar en la calle las botellas o la basura. Vamos a endurecer las multas por ensuciar las calles.

– Desde algunos sectores se lleva pidiendo desde hace años privatizar el servicio de basuras para mejorar su funcionamiento. No ha tenido nunca la tentación?

– En absoluto. No contemplo ninguna opción de privatización de los servicios públicos. Ninguna. Estoy centrado en mejorar la gestión, esa es mi responsabilidad.

– Hablaba usted antes de lluvia y de baldeos, pero no es que sobre el líquido elemento. ¿Se avecinan cortes por la escasez de precipitaciones?

– El trabajo previo y las inversiones que hemos realizado nos deben blindar ante posibles cortes de agua en los próximos meses, pero la situación a medio plazo puede ser muy complicada si sigue esta sequía. Por eso estamos ya buscando reservas a través de contratos con la comunidad de regantes.