Nueve detenidos en el mayor golpe al contrabando de tabaco
La Guardia Civil se incauta de 123.500 cajetillas, 240.000 euros y una pistola
JOSÉ L. GARCÍA
Les llamaban «los constructores» y no era por casualidad, sino porque antes de dedicarse al contrabando de tabaco habían hecho del ladrillo su modo de vida. Pero la crisis acabó con el negocio y terminó por abocarlos a ocupaciones que habían conocido años atrás, cuando ... el contrabando de tabaco estaba en un apogeo al que parece que está volviendo.
Ahora, después de nueve largos meses de investigaciones, hiladas con tesón suficiente como para que un juez autorizara quince registros simultáneos en varios pueblos, la Guardia Civil ha culminado la denominada «Operación Platanera», en la que han sido detenidos los responsables de cuatro organizaciones de contrabandistas, dos de ellas de gran envergadura. En total han sido nueve los detenidos y, lo que constituye un hecho relevante, han sido siete los que han ingresado en prisión, habida cuenta de la irrefutabilidad de las pruebas amasadas contra ellos a lo largo de la investigación. De hecho, los únicos dos detenidos que no han ingresado en prisión son una mujer que tiene niños a su cargo y un hombre de edad avanzada que sufre problemas cardiacos; aunque éstos no le impidieron, al verse descubierto, arrojar al chalé colindante con el suyo varias cajas de tabaco, y a la piscina de la casa de al lado fajos y fajos de billetes, hasta sumar 180.000 euros.
En números globales, la operación ha culminado, además de las detenciones y los quince registros en Los Molares, Utrera, Umbrete, Paradas, Marchena, Carmona y Dos Hermanas, con la incautación de 240.000 euros en efectivo, 123.500 cajetillas de tabaco de contrabando de diferentes marcas, nueve vehículos, joyas, armas blancas y una pistola automática, de origen italiano, del calibre 8 milímetros.
La «Operación Platanera» ahora culminada partió de dos investigaciones que tienen su origen en Canarias y Sevilla, respectivamente, habida cuenta de que las islas era uno de los puntos donde se surtían de tabaco los contrabandistas para posteriormente introducirlo en la península sin pagar los correspondientes impuestos. Eso se traducía, según Fernando Romero, presidente de la Asociación Provincial de Estanqueros de Sevilla, en la puesta en el mercado de tabaco casi al cincuenta por ciento de su valor real, con el consiguiente perjuicio al sector.
Los contrabandistas se surtían igualmente de tabaco en Andorra y Gibraltar, donde adquirían no sólo marcas conocidas, sino otras, caso de «Ducal», o «American Legend», con las que habían sido capaces de «abrir mercado», hasta el punto de haber creado una red de clientes afectos a esas nuevas marcas.
Las organizaciones desmanteladas ahora por la Guardia Civil habían extendido su mercado a todo el territorio peninsular, además de haberse constatado la existencia de lazos comerciales entre los contrabandistas ahora detenidos y otros de Galicia, con lo que se producía un trasvase de mercancía entre clanes. En cualquier caso, los ahora detenidos siempre procuraban que el tabaco ya tuviera comprador cuando ellos lo adquirían. De esa manera conseguían que la mercancía estuviera con ellos el menor tiempo posible.
Medidas de seguridad
Esta era sólo una de las medidas de seguridad con que contaban los contrabandistas, cuyos sistemas de salvaguarda eran, en palabras de los investigadores, más extremados, si cabe, que los de los traficantes de droga, a lo que se suma el hecho de que alrededor de las organizaciones hay una tupida red de vendedores que en el caso de las poblaciones pequeñas funcionan como eficientes informadores a la hora de detectar la presencia de cuerpos policiales que puedan ir detrás de los contrabandistas.
En este caso, los detenidos formaban parte de dos redes «mayores» ubicadas en Marchena y Los Molares, y de otras dos de menor entidad radicadas en Utrera, Paradas y Umbrete. En esta última localidad fueron detenidos D.V.G. —el único que no ha ingresado en prisión— y su hijo J.M.V.P., a quienes se consideran responsables de la distribución de tabaco de contrabando en el Aljarafe.
En el caso del clan de Marchena, los responsables han sido identificados como J.A.B.A. y R.G.A., «los constructores», ambos de 34 años, junto a quienes han sido detenidos S.L.P., de 32 años, esposa de R.G.A., y J.L.P., cuñado de éste, ambos encargados de la guarda y vigilancia de la mercancía.
En Los Molares han sido detenidos J.A.A.C. de 45 años, cabecilla de la red, y su socio J.L.M., de 58 años. Asimismo ha sido arrestado en Paradas A.P.S., a quien la Guardia Civil ya detuvo en diciembre de 2010 dentro de la «Operación Reventón», en la que se intervino una importante cantidad de tabaco de contrabando.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete